VALÈNCIA, 20 (EUROPA PRESS)
Un total de 14 mujeres de edades y procedencias muy diversas integran Dancing Choir, una coral “femenina y multicultural” que reinventa un género tan tradicional como las habaneras con mensajes sociales que visibilizan temas como los trastornos de conducta alimentaria y que, además, apuestan por la lengua valenciana.
Esta singular agrupación es una de las seleccionadas en la 70 edición del prestigioso Certamen Internacional de Habaneras y Polifonía de Torrevieja (Alicante), que se celebrará del 21 al 27 de julio y reunirá más de 800 coralistas procedentes de países de Europa, América y Asia.
En esta cita cultural, Dancing Choir presentará dos propuestas en valenciano y de temáticas “muy diferentes”: una pieza polifónica que habla de la anorexia (‘L’entrepà’) y otra folclórica de monosílabos (‘Tirallonga de monosíl·labs’).
La directora musical de la formación, María Cuenca, ha recalcado, en declaraciones a Europa Press, la “ilusión” de que el comité seleccionador haya escogido las dos canciones polifónicas en valenciano. “Vamos a darle una propuesta muy de nuestra tierra, potenciando y conservando nuestra lengua, e interpretando dos canciones que creemos que son muy interesantes y con dos temáticas muy distintas”, ha aseverado.
Cuenca cree que la decisión de incluirlas “dice mucho del perfil de este año del certamen” y añade: “No nos olvidemos que es un certamen que tiene que potenciar y que potencia la música folclórica de nacionalidades distintas, pero también de comunidades distintas”.
Dancing Choir –que está formada por 14 mujeres y lleva en activo desde el año 2020– actuará el viernes 26. “Sí, somos 14 chicas que vamos a darlo todo”, ha destacado. La agrupación cuenta con integrantes de diferentes raíces. “Nos nutrimos muchísimo culturalmente entre nosotras, tenemos a una chica ucraniana, otra francesa, otra argentina y muchas chicas valencianas”, ha subrayado.
Además de ser una coral femenina y multicultural, tiene un “valor” intergeneracional. Las coralistas son de edades “muy diversas” porque “vamos desde chicas con 24 añitos hasta mujeres muy maduras, pero se han complementado muy bien y enriquece mucho la formación”, ha señalado.
En este sentido, la directora musical, que ha dirigido corales con edades de 30 a 40 años o de 50 a 70, ha destacado que mezclar las dos franjas es “difícil” pues la complejidad “aumenta” al ser una agrupación que se “caracteriza” también por un movimiento escénico. “Hay que adaptar el movimiento a todo tipo de cuerpos, de edades y de limitaciones, porque también las tenemos; así que favorecemos todas esas cosas en nuestro trabajo”, ha añadido.
De la dirección de escena se encarga su hermana, Ainara Cuenca, bailarina y directora de teatro. Juntas crearon una escuela de Artes Escénicas, donde surgió la coral. Así, cuando María hace un montaje vocal y se elige el repertorio, Ainara está trabajando paralelamente para una propuesta interpretativa que sea “coherente”, “atractiva” y “adaptativa corporalmente”. De esta forma, en base a esta unión construyen una idea narrativa.
HABANERAS,’ENTREPÀ’ Y ‘TIRALLONGA’
El Certamen Internacional de Habaneras de Torrevieja tiene dos partes. Una es de habaneras, que es la razón por la que se creó el propio concurso. Al respecto, Cuenca ha expresado que es “algo interesantísimo y súper necesario, como es el conservar esa cultura de habanera que es propia de Torrevieja y cada año potenciar la composición de nuevas habaneras, con corales que puedan ir a cantarlas”.
Así que a esa primera parte todas las corales, incluida Dancing Choir, presentaron tres habaneras, una obligada y dos libres. Mientras que a la segunda parte, que es de música polifónica, la coral escénica envió una serie de partituras, entre las que el comité ha seleccionado dos que están en valenciano, ‘L’entrepà’ y ‘Tirallonga de monosíl·labs’.
La primera, ‘L’entrepà’, es una pieza cuya letra es de Lola Casas y la música de Rafael Aragonès, y trata sobre la anorexia y la bulimia, un tema “muy candente” hoy en día, “sobre todo en edades adolescentes”, ha señalado Cuenca, a lo que ha añadido que al ser docente desde hace mucho tiempo “lo vive, lo sufre y empatiza con ello”. “Creo que es muy importante visibilizarlo, y qué mejor manera de hacerlo que a través de la música y a través de la escena”, ha exclamado.
Asimismo, ha indicado que le pareció una partitura “bastante interesante, muy difícil de ejecutar y, sobre todo, muy difícil de interpretar a nivel escénico y vocal”. Es una de las piezas que están trabajando “muy a conciencia” con el objetivo de que el público “entienda la inquietud de la pieza, la dificultad de poder hablar de estos temas hoy en día”, ha insistido.
La otra pieza en valenciano es ‘Tirallonga de monosíl·labs’, con letra de Pere Quart y música de Antonio Giménez. Se trata de una composición “muy fresca”, “muy ágil”, “muy de final de certamen”.
“Esperemos que el público las entienda o no las entienda, pero que les llegue y lo disfruten mucho”, ha concluido la directora musical, que destaca que van a “defender” su iniciativa, por la que se han “preocupado” para que tenga un hilo argumental “coherente” que se pueda “poner en cuerpo” dentro de una propuesta escénica.
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