VALÈNCIA, 18 (EUROPA PRESS)
Inversiones Gran Valencia 2005 SL, que promueve un hotel en las naves de la calle Guatla 3, advierte, tras la suspensión de licencias en dicho entorno, que “la propiedad llevará ante las últimas instancias judiciales nacionales e internacionales”.
La Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de València aprobó este miércoles la suspensión de las licencias urbanísticas en el entorno de la calle de la Guatla, en el distrito de la Saïdia.
La administración local expone que va a iniciar la redacción de los documentos para la modificación puntual del Plan de Ordenación Urbanística, de forma que se alcancen “los compromisos que el consistorio adquirió con los vecinos para la implantación de nuevas dotaciones municipales en la zona”.
En un comunicado, la sociedad, habiendo tenido noticias a través de los medios de comunicación, de la suspensión de licencias en el entorno a la C/ Guatla de Valencia, donde tiene iniciados procedimientos administrativos para la concesión de licencia con la finalidad de construir un hotel-residencia de estudiantes, pone de manifiesto que “la decisión adoptada por la Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia se ha llevado a cabo sin contar en ningún momento con la propiedad”.
Asimismo, recalca que “ni el Ayuntamiento ni ningún grupo político que a contado con el voto favorable para tal decisión, ha entablado ni informado a la propiedad de la pretensión de suspensión de licencias”.
Añade que, “hasta el día de ayer, por parte del Ayuntamiento se están tramitando tales licencias con total normalidad e instando a la propiedad a efectuar determinados trámites administrativos”.
Advierte de que “la propiedad llevará ante las últimas instancias judiciales nacionales e internacionales, la privación y limitación de derechos que tal decisión afecta a sus legítimos intereses y al desarrollo urbanístico de la ciudad donde la carencia de plazas de residencia de estudiantes es mas que notable”.
Finalmente, subraya que “la modificación del planeamiento que al parecer se va a llevar a efecto con promesas de dotaciones en nuestra propiedad, deberá venir acompañada de una previsión presupuestaria para indemnizar las perdidas y perjuicios, así como el coste evidente por la expropiación de derechos que ello implica, en detrimento evidente de las arcas públicas por el alto coste que le va a suponer tal decisión a la administración municipal y en definitiva a todos los ciudadanos de València y a la ciudad en sí, cambiando un proyecto que traería grandes ingresos para la capital, así como el fomento de su proyección internacional en el ámbito universitario, por otro que le propiciara pérdidas y gran coste económico”.
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