LOGROÑO, 23 (EUROPA PRESS)
Testamento, poderes preventivos y caídas en la vía pública, principales fuentes de dudas legales para el 68% de los riojanos, según el Informe “Necesidades legales de los españoles” que identifica los momentos y situaciones de conflicto a lo largo de la vida, extraído del Estudio que analiza también las percepciones sobre sus posibles soluciones, realizado por onLygal.
De acuerdo con estos datos, estas preocupaciones se dividen según la etapa vital: el acoso escolar y las reclamaciones de consumo (48%) en la niñez (67%); las reclamaciones de consumo (56%) en la adolescencia; los accidentes de tráfico en la juventud (60%); la ‘okupación’ de la vivienda (64%) en la edad adulta; y el testamento y poderes preventivos y las caídas en la vía pública (68%) en la etapa senior.
Más en concreto, durante la niñez (0-12 años), las principales preocupaciones de los padres son los asuntos relacionados con el acoso escolar y las reclamaciones de consumo (48%), seguidos de problemas en el parto o negligencias médicas (44%).
Sin embargo, en la adolescencia -entre los 13 y los 17 años-, las preocupaciones de los progenitores son reemplazadas por las reclamaciones de consumo (el 56% reconoce necesitar ayuda legal para su resolución), asuntos relacionados con la movilidad: multas, accidentes… (52%), el ciberacoso y estafas, el bullying y conflictos con terceros como peleas, abusos… (48%).
La mayoría de edad trae consigo nuevas oportunidades, pero, a la vez, nuevos riesgos que requieren asesoría entre los que destacan los accidentes de tráfico (60%); las reclamaciones de consumo como viajes, ocio, servicios… (52%), las estancias en el extranjero y la inserción en el mercado laboral (48%), cuestiones relacionadas con el alquiler o la compra de vivienda (44) o las gestiones bancarias y los trámites relacionados con la compraventa de vehículos (40%).
Durante la edad adulta, se incrementan las responsabilidades y, por tanto, el tipo de situaciones susceptibles de necesitar ayuda legal. Los temas relacionados con la ‘okupación’ de la vivienda (64%), el divorcio y los asuntos laborales (60%) son los más relevantes para los riojanos, seguidos del fraude bancario y la violencia doméstica (52%); el fraude online y la gestión de deudas e impagos (48%).
A partir de los 65 años, los asuntos relacionados con la planificación futura como el testamento y poderes preventivos, y las caídas en la vía pública (68%), son la mayor fuente de preocupación. Les siguen la herencia y la solicitud de ayudas asistenciales por dependencia (64%); la gestión de bienes y patrimonio (60%), la gestión de pensiones de jubilación y/o viudedad (56%), así como las estancias hospitalarias y las reclamaciones de consumo (52%).
A QUIÉN SE ACUDE PARA RESOLVER LAS DUDAS LEGALES
Si bien los riojanos aseguran resolver algunas dudas legales con los conocimientos adquiridos a través de publicaciones o Internet, lo cierto es que también son conscientes de las limitaciones que conllevan, admitiendo ser necesario acudir a profesionales para resolverlas.
De acuerdo con el Informe de onLygal, los abogados son la principal fuente de consulta cuando existen dudas relacionadas con el divorcio -división de bienes, custodia, pensión de alimentos- (76%); temas laborales (56%) o Internet -estafas, acoso, suplantación de identidad- (52%).
Destaca además que, pese a que el 32% de los riojanos se ha planteado emprender acciones legales en alguna ocasión, solo el 16% asegura haberlas llevado a cabo.
Como principal freno apuntan a la percepción del coste económico, seguida de la complejidad de los procesos, evitar problemas y estrés, la inseguridad del resultado, así como no conocer ningún servicio legal de confianza.
Junto a los abogados, para herencias, los notarios son la principal fuente de conocimiento acreditado (27%). Por su parte, se acude principalmente a los gestores para cuestiones relacionadas con la declaración de la renta y deducciones fiscales (61%), así como con el régimen de autónomos o la creación de empresas (49%) o la compraventa/alquiler de vivienda (38%).
Para el resto de asuntos, como la solicitud de becas y subvenciones, la compra de productos o la contratación del servicio doméstico se consultan las webs especializadas, aun reconociendo sus limitaciones.
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