No es fácil de entender cuando se ve a alguien a quien se quiere haciéndose daño físico de forma deliberada. O contar que llevas tiempo haciéndolo. La autolesión es un daño corporal autorrealizado, sin intención suicida, no aceptado por la sociedad, intencional, para reducir y/o comunicar malestar psicológico.
¿Qué es la autolesión?
La autolesión es una conducta en la que una persona se causa daño físico a sí misma sin intención suicida. Este comportamiento no es aceptado por la sociedad y se realiza de forma intencional para reducir o comunicar malestar psicológico.
Motivos de la autolesión
El uso de esta conducta puede tener dos principales razones:
- Finalizar una emoción intensa: La persona experimenta una gran cantidad de sufrimiento y confusión emocional, sin saber exactamente qué siente.
- Terminar con un estado de desconexión: La autolesión ayuda a la persona a aterrizar en la realidad, enfocándose en un dolor tangible que pueden describir y justificar, poniendo fin a una tormenta interna.
Cómo ayudar a un familiar o amigo
Informarse
Para poder ayudar a un familiar o conocido cuando revela o se descubre que hace uso de la autolesión, lo principal es informarse adecuadamente. Dirígete a páginas confiables que proporcionen buena información y orientación.
Ser comprensivo sin reforzar la conducta
Es crucial que la persona que se autolesiona sepa que puedes separar lo que ellos son de lo que hacen y que los amas independientemente de su comportamiento. Evita reforzar la autolesión, cuidando a la persona después de la conducta sin hacer de ese cuidado algo extraordinario.
Establecer límites razonables
Pon límites razonables donde puedas expresar que no puedes manejar estar presente mientras la persona se autolesiona. No uses la retirada de cariño como herramienta para que dejen de autolesionarse. Hazles saber que no necesitan autolesionarse para conseguir tu amor y atención.
Ofrecer alternativas
Ofrece distracciones como hablar sobre otros temas, salir a pasear o ver una película. A veces, los actos espontáneos pueden ser de gran ayuda ya que la persona puede no estar en condiciones de pensar o decidir por sí misma.
El autocuidado es esencial
El autocuidado es básico. Encuentra momentos para satisfacer tus propias necesidades, descansar, establecer límites y recargar energías. Recuerda que necesitas estar bien para poder ayudar a los demás.
Establecer confianza
Hazle saber a la persona que no tiene que estar a punto de morir para conseguir tu amor y atención. Desarrolla la confianza, un proceso que tomará tiempo. Una vez que le demuestres que no te vas a marchar a la primera señal de problema, podrás tomar descansos en tiempos de no crisis sin provocar una respuesta de crisis.
Estrategias ineficaces
Los ultimátums no funcionan. A veces, la conducta de autolesión se suprime temporalmente, pero cuando inevitablemente emerge, es más destructiva e intensa. Los castigos solo alimentan el ciclo de auto-odio e irritabilidad que conduce a la autolesión.
Aceptación y reconocimiento
Aceptar y reconocer que a alguien le duele algo no hace que el dolor desaparezca, pero puede hacerlo más soportable. Hazle saber que entiendes que la autolesión no es un intento de hacerte la vida difícil; reconoce que es causada por un dolor genuino. Transmite la esperanza de aprender otros modos de enfrentar el dolor y habla sobre posibilidades de tratamiento si la persona está abierta a ello.
Paciencia y tiempo
No fuerces las cosas. Si tus propuestas son rechazadas, renuncia a ellas por unos días o semanas. No presiones. Algunas personas necesitan tiempo para confiar en alguien más, especialmente si han recibido muchas reacciones negativas anteriormente. Sé paciente.
El autocuidado para ti es esencial. Hablar con personas que tienen familiares o amigos en esa situación puede darte consuelo y alivio. Existen grupos de ayuda mutua, asociaciones e incluso foros o comunidades en internet. No olvides que la autolesión es una conducta para manejar emociones insoportables. En Centro Psicología y Mente están para ayudarte. Puedes contactar con ellos en la web centropsicologiaymentemalaga.es o llamando al 602 246 161.
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