PALMA, 4 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Palma ha fumigado una superficie de entre 35 y 40 hectáreas de terrenos inundados del término municipal para evitar la proliferación del mosquito tigre, después de que los técnicos especializados detectaran una alta presencia de larvas.
La actuación se ha llevado a cabo este martes y para ello se ha empleado un helicóptero que ha realizado un tratamiento en las zonas con mayor cantidad de agua estancada, como son Ses Fontanelles, Balsa Can Guidet, la acequia de Es Pil·larí y terrenos inundados del Pla de Sant Jordi, donde el tratamiento no puede llevarse a cabo sólo con medios humanos.
En una nota de prensa, el Consistorio ha indicado que se ha aplicado el producto larvicida en estas zonas que, de haberlo hecho con medios humanos, hubiera supuesto varios días y la probabilidad de que algunas larvas hubieran eclosionado en el tiempo en el que completaba el tratamiento.
El servicio de control de plagas municipal, que está a cargo de la empresa Lokímica, mantiene durante todo el año un plan de vigilancia basado en la monitorización periódica de las colecciones hídricas que usan los mosquitos para reproducirse.
El objetivo es detectar la presencia de ejemplares de mosquito tigre en fase de larva y actuar para controlar dichas poblaciones en este momento de su ciclo biológico. El periodo de mayor actividad de las especies de mosquito tigre se inicia en el mes de abril y en mayo ya se observan importantes densidades poblacionales.
El aumento de la luz solar y de la temperatura, junto a la presencia de agua estancada, son los dos factores principales que posibilitan el desarrollo de la larva. Según los expertos, los tratamientos larvicidas son “más eficaces, selectivos, específicos y seguros para las personas y más respetuosos con el medioambiente”, dado que han aseverado que “no afecta a otras especies, ni animales ni vegetales”.
En este sentido, la directora general de Sanidad, Consumo, Mercados y Ferias del Ayuntamiento de Palma, María del Carmen Esparza, ha destacado que se hace necesaria la intervención con medios aéreos para “garantizar la seguridad del personal técnico que ha de aplicar el producto larvicida en grandes extensiones de terreno inundado”.
Del mismo modo, ha explicado que, con esta intervención, el Ayuntamiento pretende dar una mayor cobertura del espacio geográfico sometido a tratamiento en “un tiempo récord” y reducir considerablemente el riesgo de proliferación incontrolada en las siguientes semanas, al evitar que afecte a la población.
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