MADRID, 21 (SERVIMEDIA)
El Gobierno de España considera adoptar distintas medidas diplomáticas ante la negativa del presidente de la República Argentina, Javier Milei, de disculparse por los insultos y acusaciones vertidas contra el líder del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y su esposa, Begoña Gómez, durante su intervención este fin de semana en un acto de Vox en Madrid.
Según fuentes del Ejecutivo, tras haber retirado a la embajadora española en Buenos Aires, María Jesús Alonso, no descartan adoptar otras medidas en el ámbito de la diplomacia si el ‘enroque’ de Javier Milei se mantiene.
La situación, señalaron las citadas fuentes, solamente puede equipararse a la que se vivió con Venezuela en abril de 2016, cuando el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, retiró al embajador español en Caracas después de que Nicolás Maduro le tildara de “racista, basura corrupta y basura colonialista”.
En esta ocasión, fuentes del Ejecutivo español trasladan que han tenido mucha paciencia con Milei, tras las reiteradas ocasiones en las que ha atacado a Pedro Sánchez y a su esposa, y subrayan la gravedad de los insultos que profirió en Madrid, cuando el Gobierno le ofreció los privilegios en el trato de un jefe de Estado, con la Base Aérea de Torrejón y el dispositivo de seguridad.
El hecho de que el ataque se realizar en Madrid añade un “plus de gravedad”, ante el que no existen precedentes, y después del comunicado que publicó la Presidencia argentina condenando las palabras del ministro Óscar Puente. Subrayan igualmente que tampoco existen precedentes de que el presidente de un país hermano, como es Argentina, visite España y no solicite reunirse con sus autoridades, y más siendo la primera visita al país.
Con respecto a una proyectada nueva visita de Milei el próximo 21 de junio, para recibir un premio del Instituto Juan de Mariana, se valorará la agenda del presidente argentino, y siempre bajo la premisa de que “España no amenaza, actúa”, ya que el objetivo del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación no es entrar en una escalada de tensión, pero siempre responderá ante injerencias.
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