MÉRIDA, 12 (EUROPA PRESS)
La concesionaria del servicio de aguas de Mérida, Aqualia, ha invertido 350.000 euros para instalar en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) más de 600 placas solares fotovoltaicas que producirán la energía equivalente al 40 por ciento del consumo energético anual de estas instalaciones, permitiendo incluso autoabastecerse con coste cero durante las “horas punta”.
El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, acompañado por la concejala de Urbanismo, Silvia Fernández, ha visitado este viernes la EDAR para conocer de primera mano la puesta en servicio de este proyecto con capacidad para producir 500.000 kilovatios al año, que se traducen en un ahorro de emisiones de 2 millones de toneladas de CO2.
Una inversión que realiza la concesionaria y que está “alineada” con las actuaciones que realiza el ayuntamiento en todas las instalaciones municipales en materia de eficiencia energética, y que suponen también una modernización de la principal planta de depuración de aguas de Mérida.
El responsable de Aqualia para Extremadura, David Díez Fontón, ha destacado que al situarse el oeste de la península ibérica, Mérida cuenta con “muchas horas de luz”, y que las instalaciones de la EDAR es “generosa en terrenos”, con lo cual tenían “todo a favor” para acometer una inversión de estas características, al tiempo que ha remarcado que la empresa está alineada con el ayuntamiento en la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible y en reducir la huella de carbono.
Así, ha explicado que las placas son de consumo directo, ya que no tienen acumuladores, con una potencia instalada son 360 kilovatios que permiten cubrir “el 100% de la demanda de consumo energético de la depuradora en horas punta”. En el acumulado del año, contabilizando las horas de sol de invierno y verano, y las noches, la instalación aportará “algo más del 40% del consumo” total, con lo cual la reducción de huella de carbono es “elevada”.
Asimismo, ha subrayado que el autoconsumo energético les va a permitir tener “un control de la energía, y no estar en el vaivén del mercado ni de la demanda”, que es el objetivo que vienen persiguiendo, en el sentido de que las instalaciones sea “lo más independientes y los más sostenibles posibles a lo largo del tiempo”.
Preguntado sobre si esta inversión se traducirá en un ahorro en la factura que llega al consumidor, ha señalado que lo que va a permitir es que el suministro energético sea “estable” y ya no dependa del mercado. En este sentido, ha señalado que a la hora de calcular el retorno de la inversión, no es lo mismo calcularlo con los precios de la electricidad de la semana pasada que los de hace un año.
Lo que sí pueden asegurar es que “el 40% del recibo energético, que pesa muchísimo en el cálculo del precio del agua al consumidor, pues ya va a ser estable, no va a someter a vaivenes”.
OBRA DE REMODELACIÓN PENDIENTE
Por otro lado, se ha referido a las obras de remodelación de las instalaciones aprobadas por la Junta de Extremadura en 2021 pero que se han retrasado debido a una nueva licitación en la que se han ajustado los precios de coste.
Unas obras licitadas para dar respuesta a “algunos problemas de diseño” de unas instalaciones que, además, ya son antiguas, lo cual supone “un cuello de botella para la planta”.
Según el responsable de Aqualia, ya se ha aprobado el modificado del contrato pero la obra no ha comenzado, lo cual “sería muy interesante que estuviera cuanto antes ya en servicio”.
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