Ahora todo queda en manos de la Policía, que investiga el origen y las causas de este incendio, que ha calcinado una treineten de vehículos
SANTANDER, 11 (EUROPA PRESS)
Los Bomberos de Santander han dado por finalizada su intervención en la extinción del incendio ocurrido esta madrugada en el garaje comunitario en la calle José María Cossío, en el barrio de El Alisal de la capital cántabra, después de que en una visita de control realizada esta tarde hayan confirmado que “todo está en orden” y comprobado que no se ha reavivado ningún rescoldo.
Así lo han confirmado a última hora de la tarde fuentes municipales a Europa Press, que han explicado que ahora todo queda ya en manos de la Policía para que realice las averiguaciones que correspondan sobre el origen y las causas de este incendio, que ha calcinado cerca de una treintena de vehículos (al menos 28, según el último dato disponible: 19 coches y 9 motos) y más de 50 dañados.
Los bomberos recibieron el aviso porque salía mucho humo de la entrada de un garaje de El Alisal sobre las tres de la madrugada y el fuego quedó controlado sobre las 6.30 horas.
El garaje afectado se trata de un parking corrido que da servicio a cuatro comunidades y alberga más de 150 vehículos. En el interior se han alcanzado los 900 grados centígrados, si bien la estructura del edificio no ha resultado afectada.
En un primer momento se confinó en sus viviendas a todos los vecinos para que no inhalasen el humo. Posteriormente, pudieron salir a la calle.
Después, durante el día, ya en el exterior de sus casas y en medio del amplio dispositivo desplegado en la zona, se han quejado de falta de mantenimiento y dejadez en el garaje, que ya sufrió otro incendio en 2007.
A primera hora, los vecinos no tenían agua ni luz, si bien a lo largo del día estos servicios ya se han restablecido.
Al lugar del incendio acudieron efectivos de la Policía Judicial de la Policía Nacional para iniciar la investigación del origen y causas del incendio. Agentes especializados del Cuerpo accedieron a la instalación por la mañana, una vez sofocado el fuego.
Las llamas han provocado cuantiosas pérdidas materiales pero no ha habido que lamentar daños personales, salvo un bombero herido leve, por un corte en una mano.
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