PAMPLONA, 24 (EUROPA PRESS)
El 41% de los navarros viajará esta Semana Santa, según refleja una encuesta encargada por la Asociación de Consumidores de Navarra Irache. Este porcentaje es dos puntos menor que el del año anterior.
Entre las personas que viajarán, la mayor parte, el 53%, irá a otra comunidad autónoma; un 30% viajará a otra localidad dentro de Navarra; y un 18% irá al extranjero. Por edad, los mayores de 65 años son los que menos viajan en estas fechas y los que están entre 30 y 45 años son los que más van a otros países. Los menores de 30 años, por su parte, son los que más se trasladan a otra comunidad.
Según explica Irache en una nota de prensa, buena parte de las quejas que se reciben por vacaciones tienen que ver con los problemas con el alojamiento. “Muchas personas muestran su malestar porque el hotel no ofrece las prestaciones que publicita en su página web o porque el apartamento no tenía las características prometidas”, señala la asociación, que apunta que “lo fundamental es que en la reserva o el contrato conste de la forma más detallada posible las características del alojamiento”.
Por otro lado, en reservas realizadas con intermediarios “no está de más contactar directamente con el alojamiento para corroborar que la reserva responde a las condiciones pactadas”. Conviene revisar las condiciones de cancelación al reservar que “determinarán si podemos echarnos atrás y con qué antelación o qué porcentaje perderemos si cancelamos”. “Si no ofrecen posibilidades de cancelación, corremos el riesgo de perder todo el dinero que cuesta la reserva si nos echamos atrás”, advierte.
Otras quejas muy repetidas por vacaciones suelen ser los retrasos por los vuelos. “Ante un retraso que supere las tres horas, salvo que se produzca por circunstancias extraordinarias, hay unas compensaciones por pasajero que varían según la distancia del vuelo: si la distancia recorrida es menor a 1.500 kilómetros, 250 euros; si la distancia está entre 1.500 y 3.500 kilómetros, 400 euros; y si es mayor, la compensación deberá ser de 600 euros”, detalla Irache.
Por otro lado, si se cancela el vuelo, el consumidor también tiene derecho a que le devuelvan íntegro el billete. Aunque algunas compañías ofrecen un bono para usar más adelante, el consumidor no tiene por qué aceptarlo y puede exigir la devolución. “Todo ello, más allá de que el consumidor pueda pedir una indemnización por los perjuicios añadidos como, por ejemplo, haber perdido una noche de hotel”, ha indicado.
Relacionado con el transporte, se suelen dar incidencias con el equipaje, ya sea por daños, retrasos o pérdida. Lo primero que hay que hacer es buscar en el aeropuerto de destino el puesto de la compañía aérea para rellenar el Parte de Irregularidad de Equipaje. Si la maleta presenta daños, tiene siete días desde que la recibió para enviar una reclamación formal; y si se trata de un retraso, veintiún días. Irache ha llamado a guardar los justificantes “de todo lo que necesite comprar por no tener el equipaje”. Posteriormente, se pueden adjuntar estos tiques a la reclamación que se efectúe.
Si se han contratado las vacaciones a través de una agencia de viajes se puede exigir que se cumplan “todos los servicios ofrecidos en el paquete vacacional”. El precio tampoco debe variar respecto al pactado.
En general, si hay cualquier incumplimiento en el viaje, “conviene dejar constancia de él por escrito cuanto antes, más allá de que posteriormente se pueda realizar una reclamación más formal”.
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