VALÈNCIA, 8 (EUROPA PRESS)
Solo el 52,2% de las paradas de masas fritas instaladas por València con motivo de Fallas tienen la autorización a la vista del público, una autorización que es ilegible al igual que en los últimos años.
Así lo ha constatado la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU), que ha visitado durante esta última semana más de medio centenar de puestos de venta de buñuelos, churros y otras masas fritas en la ciudad para comprobar el cumplimiento de lo establecido en el Bando de Fallas 2024 del Ayuntamiento de València.
Entre los puestos visitados, el 52,2% tiene la autorización a la vista, frente al 49% de 2023 y al 33,9% de 2022. Sin embargo, como en años anteriores, esta autorización es ilegible por parte de los consumidores en la mayoría de los casos.
Por otro lado, siete de cada diez paradas analizados cuentan con el cartel de hojas de reclamaciones a disposición de los usuarios.
En cuanto a los productos, están protegidos en el 77% de los puestos, lo que supone una ligera mejora con respecto al año anterior. El 20% tiene algunos de los productos protegidos en vitrinas, pero no todos, y un escaso 3% no tiene ninguno.
Respecto al precio, el 83% de puestos analizados sí tiene la lista a la vista, aunque en algunos casos la letra es pequeña y se lee con dificultad. El 13% no anuncia sus precios, frente al 24% del año pasado.
CHURROS Y BUÑUELOS MÁS CAROS
Según AVACU, el precio medio de la docena de churros oscila este año entre 7 y 8 euros, frente a los 6-7 de 2023, llegando en algunos casos hasta 10 euros.
En cuanto a los buñuelos, el precio habitual de la docena se sitúa en 8 euros, pero llega hasta 12 euros en algunos de los puestos visitados mientras que el año pasado se situaban entre 6 y 10 euros.
Desde la organización recuerdan a los consumidores la importancia de acudir a puestos que cumplan con lo establecido en el Bando fallero, así como comprobar que los productos a la venta estén correctamente protegidos por vitrinas, y solicitar el tique o factura de compra.
“Siempre es una buena noticia una mejora en el cumplimiento de las normas, y la mayor presencia de los servicios de inspección del Ayuntamiento de Valencia durante estos días ha sido sin duda uno de los factores que ha posibilitado esa mejora. No obstante, somos los propios consumidores los que debemos verificar que durante todas las Fallas se siguen cumpliendo y denunciar a los que, cada vez en menos cantidad, incumplen algún parámetro. El consumo de masas fritas se multiplica estos días y nuestra prevención con ello; queremos calidad y seguridad al precio más ajustado para disfrutar de este fallero producto sin problemas”, expresa Fernando Móner como presidente de AVACU.
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