Más de medio millón de palestinos están al borde de la hambruna, aunque este número crece cada día
MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha pedido este martes ante el Consejo de Seguridad de la ONU el alto el fuego y la “restauración” del espacio humanitario en la Franja de Gaza para poder brindar asistencia humanitaria y eliminar el riesgo de hambruna.
El subdirector general del organismo, Maurizio Martina, ha señalado que la población palestina en Gaza está experimentando niveles catastróficos de inseguridad alimentaria inducida por el conflicto y un alto riesgo de hambruna que aumenta cada día, por lo que ha destacado la necesidad de abrir los pasos fronterizos de forma que se incluya el tráfico comercial.
“Todas las partes deben respetar sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional Humanitario y de Derechos Humanos, y proteger a los civiles y los bienes indispensables para su supervivencia. Un alto el fuego inmediato y la paz son requisitos previos para la seguridad alimentaria, y el derecho a la alimentación es un derecho humano básico”, ha declarado.
Martina ha indicado que se debe proceder a la restauración inmediata de tuberías de agua transfronterizas, la reanudación de la distribución de electricidad y comunicaciones, y la restauración de instalaciones sanitarias, así como instalaciones para la gestión de residuos y procesamiento de alimentos.
En este sentido, ha denunciado el impacto devastador del conflicto en los sistemas agroalimentarios gazatíes, citando las restricciones a los envíos de combustible, los apagones de electricidad (la única central eléctrica cerró el 11 de octubre al quedarse sin combustible), la escasez de agua potable o la falta de importaciones de artículos esenciales (que ha diezmado el sector comercial).
Además, la infraestructura agrícola ha quedado devastada, la cosecha de aceitunas y cítricos, que constituye una importante fuente de ingresos, se ha visto afectada, así como las pérdidas sufridas por el sector ganadero (la tasa de mortalidad de terneros se sitúa en el 50 por ciento y el 70 en el ganado de vacuno) y el pesquero marítimo, por la destrucción a la infraestructura y las restricciones al acceso al mar.
El secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Ramesh Rajasingham, ha dicho ante los presentes que la situación es grave y que prácticamente toda la población depende, lamentablemente, de “una asistencia alimentaria humanitaria inadecuada para sobrevivir”.
“Desafortunadamente, por muy sombrío que sea el panorama que vemos hoy, existen muchas posibilidades de que se produzca un mayor deterioro”, ha observado después de cifrar en uno de cada seis los niños menores de dos años en el norte de Gaza que sufre desnutrición aguda. El hambre y el riesgo de hambruna se ven exacerbados por factores que van más allá de la disponibilidad de alimentos, ya que a la falta de nutrición, se añade el hacinamiento crónico, la exposición al frío y la falta de alojamiento adecuado.
Más de medio millón de personas (uno de cada cuatro hogares) está a “un paso de la hambruna”, cifra que crece cada día por los continuos bombardeos y los obstáculos a la entrega de ayuda humanitaria. Alrededor del 50 por ciento de la población del enclave se encuentra en situación de emergencia, mientras que el total (2,2 millones de palestinos) se encuentran en crisis alimentaria.
PETICIONES DE ACCESO A AYUDA HUMANITARIA
El representante del Estado de Palestina en la ONU, Riad Mansur, ha afirmado que hay “una hambruna en marcha” en Gaza y ha pedido “detenernos un momento y considerar lo que esto realmente significa”, ya que los civiles buscan comida entre los escombros, la arena y la basura.
El diplomático ha afirmado que Israel ha sido el arquitecto de esta catástrofe humana y humanitaria, que ha diseñado deliberadamente para castigar colectivamente a los 2,3 millones de palestinos de Gaza. “Que se haya permitido que esta hambruna y genocidio catastróficos ocurran y continúen durante tanto tiempo nos avergüenza a todos”, ha afirmado.
Por su parte, el representante adjunto de Israel, Brett Jonathan Miller, ha afirmado que su delegación está comprometida a mejorar la asistencia humanitaria en Gaza, facilitando la entrada de ayuda en los cruces establecidos, y agregando nuevas aperturas. “No hay límite”, ha afirmado, antes de agregar que la mayoría de solicitudes de ayuda son aprobadas.
Mientras que la parte estadounidense ha pedido a Israel que “haga más”, Reino Unido ha indicado que la situación se tiene que abordar después de que “dejen de luchar inmediatamente”. Esto, afirma, permitirá la entrada de ayuda, la salida de los rehenes y avanzar hacia un alto el fuego.
El representante francés ha afirmado que “la falta de acceso humanitario suficiente a una población en una emergencia humanitaria absoluta es injustificable”, mientras que el ruso ha señalado que el Consejo de Seguridad podría adoptar sanciones. El diplomático chino ha aseverado que las autoridades israelíes deben abrir todo acceso a la ayuda, remarcando que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) es el “salvavidas” del pueblo palestino.
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