OVIEDO, 15 (EUROPA PRESS)
La consejera de Educación, Lydia Espina, ha confirmado este jueves que las técnicas de educación infantil tendrán categoría C1 cuando se integren en el Principado. También ha indicado que las direcciones de las escuelas de 0 a 3 años en la nueva red autonómica seguirán a cargo de maestras y maestros “en las mismas condiciones”.
Espina ha respondido así a las diputadas del Grupo Mixto-Podemos, Covadonga Tomé, y del PP, Gloria García, en la comisión parlamentaria celebrada el mismo día que el BOPA publica el anteproyecto de ley que regulará la integración de las escuelas municipales en la futura red autonómica, pública y gratuita.
La consejera ha argumentado que se mantendrán las condiciones del personal, de tal forma que quienes fueron contratadas como maestras-directoras así seguirán, y se hará lo propio para quienes fueron contratadas como técnicas de educación infantil.
Respecto a la categoría, ha matizado que no por haber estudiado magisterio se va a estar en una categoría superior si el puesto es de técnico. “Como técnicas de educación infantil, la categoría profesional conforme al convenio colectivo del Principado de Asturias se encuentra dentro del grupo C, subgrupo C1, de clasificación profesional”, ha dicho, ahondando en que ya existe en la plantilla del Principado la figura de técnico o técnica de educación infantil, con personal en cuatro escuelas que lleva Bienestar.
Al respecto, Gloria García ha pedido al Principado que la titulación en magisterio “cuente a la hora de baremar”, como ocurre en otros procesos selectivos, “aunque sigan teniendo la categoría de técnicos en educación infantil”.
Por su parte, Covadonga Tomé Tomé ha resaltado que ayuntamientos como Mieres, Noreña, Grado, Siero, Avilés o Gozón, “con la excusa de que eran trabajadoras de una competencia que les era ajena”, no estabilizaron a las educadoras de las escuelas de 0 a 3 años. “Ya partimos de una situación de desigualdad”, ha dicho, poniendo también el acento en la existencia de falsas medias jornadas.
Pide, también, igualar las retribuciones al alza para que no haya diferencias en función del ayuntamiento de origen y dar “estabilidad” a un colectivo laboral “eminentemente feminizado” y que en lugar de personal laboral del Principado dependan de la Consejería de Educación porque “lo fundamental es que se trata de una etapa educativa más”.
En cuanto a la categoría profesional, Tomé sostiene que “deberían ser categoría B, igual que el resto de los técnicos superiores de la Administración Pública, lo cual, por cierto, conlleva un cierto incremento salarial”.
La consejera ha reiterado que la integración del personal de las actuales escuelas municipales “se hará en las mismas condiciones en las que se encuentran, garantizando todos sus derechos como recoge la ley”. “Posteriormente llegará el momento de negociar su integración en el convenio de personal laboral”, ha señalado, remarcando que las técnicas de educación infantil “no son docentes, legalmente no lo son”.
En cuanto a la estabilidad, Espina incide en que “el anteproyecto de ley dice expresamente en su preámbulo que el personal de los ayuntamientos que voluntariamente se integren en la red conservará sus derechos laborales y su categoría profesional derivada de los contratos de trabajo que tengan en vigor en el momento de la integración”.
“Lo que sí podemos hacer es hacer concursos-oposición para que, cuando llegue el momento, aquellas trabajadoras temporales que estén con nosotros, de cualquier índole, puedan tener esa oportunidad de estabilizarse porque nosotros lo que queremos es estabilizar”, ha asegurado, resaltando la primera convocatoria que se hará en próximos meses con 120 plazas de técnicas de educación infantil y 17 de maestras para esas primeras 31 escuelas de la red autonómicas que se pondrán en marcha este 2024.
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