Reclama a los socialistas mantener una primera reunión y definir los cargos que formarán parte de este organismo
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
Sumar ha solicitado formalmente al PSOE contituir la comisión permanente de seguimiento del acuerdo de Gobierno, cuya función es revisar el funcionamiento de la coalición evaluar el cumplimiento de los objetivos y coordinar la acción de los dos socios del Ejecutivo.
Así lo ha planteado el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, y el coordinador ejecutivo de la formación, Josep Vendrell, en un escrito dirigido a la vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, y el secretario de Organización de los socialistas, Santos Cerdán.
El socio minoritario de la coalición indica en su escrito que el pacto alcanzado con el PSOE pautaba que dicha comisión debía constituirse tras la constitución del Gobierno de coalición, inicialmente en un plazo de 30 días posteriores.
De esta forma y una vez expirado ese plazo, Sumar reclama al PSOE dar cumplimiento de lo establecido en el pacto de coalición y se convoque este organismo, así como a los miembros de ambas formaciones que deben integrar la comisión de seguimiento.
El objetivo, según plantea Sumar, es mantener una primera reunión para analizar el funcionamiento del Ejecutivo de coalición. Y la formación que lidera Yolanda Diaz hace esta petición tras remitir la semana pasada sus propuestas de cara a la negociación de los Presupuestos dentro del Ejecutivo en materia de sanidad y cuidados.
PSOE y Sumar se han posicionado durante este periodo a favor de Ley de Amnistía y también han impulsado medidas como la prórroga del decreto anticrisis, mientras que mañana se aprobará una nueva subida del salario mínimo.
No obstante, han explicitado también varias discrepancias como en los proyectos de ampliación del Puerto de Valencia o del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, a los que Sumar se opone. Mientras, el socio minoritario ha defendido hacer permanente el impuesto a la banca ante sus beneficios extraordinarios.
También la propia Díaz mostró su desacuerdo con la modificación del impuesto a las eléctricas para bonificar determinadas inversiones, medida que tildó de rechazo fiscal. También hubo choque entre Trabajo y Economía a la hora de aplicar la reforma del subsidio de desempleo hasta llegar finalmente a un acuerdo.
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