Reconoce que este cambio de postura sobre la guerra le habría costado el puesto a cualquier político europeo en las últimas décadas
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radoslaw Sikorski, ha reconocido este lunes que en algunos países europeos se ha producido un cambio de discurso y, en el marco de la invasión rusa de Ucrania y de la posible amenaza que representa Moscú, “se habla de preparación para la guerra”.
De acuerdo con Sikorski, algunos de los principales actores europeos, como “Alemania, Suecia y algunos otros países”, han protagonizado un cambio de postura que “habría acabado con la carrera de cualquier político que hubiera dicho algo así durante las últimas décadas”.
El ministro de Exteriores polaco ha incidido en que la confrontación bélica con Rusia tan solo se producirá si el presidente Vladimir Putin da el primer paso. “Espero que Putin no esté tan loco como para atacar a la Alianza del Atlántico Norte”, ha dicho Sikorski a la revista ‘Newsweek’.
Sin embargo, respecto a la invasión rusa de Ucrania, el representante de la diplomacia polaca ha señalado que Rusia se había estado preparando durante los últimos años para este paso, mientras que las principales potencias occidentales pensaban que “solo era un juego”.
Sikorski ha señalado que Occidente pensó que Rusia no podía ser una amenaza seria porque “Putin no podía estar tan loco como para disparar”, pero los hechos han demostrado que Rusia “se estaba preparando sistemáticamente” para invadir Ucrania y por ello construyó el Nord Stream, acumuló reservas de oro y trasladó activos.
“Si hace diez años el estatus de superpotencia de Rusia era incuestionable y la independencia de Ucrania era condicional, hoy las élites europeas ya no dudan de que los ucranianos merecen la independencia, que son una nación dispuesta a morir y matar por ella”, ha añadido el ministro polaco.
Así las cosas, el jefe de la diplomacia polaca ha instado a la comunidad internacional a restablecer el ‘status quo’ en la región de Europa del Este, obligar al Estado agresor a retirarse y ayudar a la víctima. Además, ha apuntado a que se deben confiscar los activos rusos en el extranjero.
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