La Policía israelí indica que los sospechosos son residentes en Jerusalén Este que planeaban atentados contra las fuerzas de seguridad
MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Israel han anunciado este jueves la desarticulación de una serie de ataques con explosivos contra las fuerzas de seguridad planificados por dos seguidores del grupo yihadista Estado Islámico.
La Policía de Israel ha indicado en un comunicado publicado en su cuenta en la red social X que los sospechosos, residentes en Jerusalén Este, “fueron arrestados antes de que pudieran materializar sus planes”, antes de especificar que fueron detenidos en diciembre.
“Siguiendo órdenes del Shin Bet, detectives y agentes de la Policía de Jerusalén arrestaron hace cerca de un mes a un residente de Yebel Mubaker, en Jerusalén Este. Posteriormente, su amigo y también sospechoso, también residente en Yebel Mubaker, fue arrestado”, ha manifestado.
Así, ha subrayado que “la investigación ha revelado que los dos terroristas apoyan la ideología de Estado Islámico y consumían mucho contenido de la organización a través de Internet y Telegram (…) incluidos vídeos de asesinatos en las zonas de combate de la organización en el extranjero”.
“Bajo la influencia de los contenidos de la organización, los dos planearon perpetrar ataques terroristas contra agentes de la Policía y las fuerzas de seguridad”, ha dicho, al tiempo que ha asegurado que ambos “iniciaron preparativos para llevar a cabo ataques terroristas y preparar explosivos” antes de su detención.
Por otra parte, ha señalado que en el teléfono móvil de uno de los sospechosos han sido encontrados materiales pedófilos, por lo que “se ha abierto otra investigación contra él” en relación con los mismos.
Las detenciones se enmarcan en el reciente aumento de tensiones en un repunte de la violencia en lo que va de año, que se ha recrudecido tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) contra territorio israelí, que se saldaron con alrededor de 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados.
El Ejército de Israel lanzó tras ello una ofensiva contra la Franja de Gaza, controlada por el grupo islamista palestino, que deja hasta ahora más de 23.300 muertos, a los que se suman más de 325 palestinos muertos en Cisjordania y Jerusalén Este en operaciones de las fuerzas de seguridad israelíes o ataques por parte de colonos.
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