SANTANDER, 20 (EUROPA PRESS)
La Consejería de Cultura, Turismo y Deporte ha acordado ampliar 12 meses el plazo para resolver el procedimiento de declaración de Bien de Interés Local (BIL), con la categoría de Monumento, a la Torre del Reloj de Limpias, cuyo expediente se incoó hace un año.
Entonces se solicitó informe a dos de los órganos asesores de la Consejería, al Colegio Oficial de Arquitectos de Cantabria y al Centro de Estudios Montañeses, que han formulado diversas propuestas para la mejor protección del bien y que incluyen tanto los elementos arquitectónicos de la torre como los mecanismos de relojería.
También sugieren determinar si todos los elementos deben ser objeto de protección íntegra o si algunos son susceptibles de ser modificados o suprimidos si así lo exigiera la protección del bien o fuera conveniente para su conservación y evolución; y por lo que se refiere al entorno de protección, se propone precisar los usos y condiciones, así como su ampliación para incluir los dos caminos tradicionales de acceso a la Torre.
Según señala el acuerdo de la Consejería, publicado este lunes en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC), las propuestas se consideran “beneficiosas para la mejor protección del inmueble”, pero, dado que suponen una modificación sustancial del planteamiento inicial de incoación del procedimiento de declaración; que la ampliación del entorno de protección conllevará nuevos interesados en el procedimiento; y que el órgano instructor del expediente “no cuenta actualmente con efectivos en la sección competente para gestionar su tramitación”, se considera necesario ampliar el plazo de resolución del procedimiento por doce meses.
TORRE
A la hora de incoar el expediente, se ha considerado que la Torre del Reloj tuvo un papel relevante en la identidad cultural del municipio desde que el conde de Albox invirtiera parte de su capital en dotar de servicios a su Limpias natal y, en particular, sufragase la edificación de esta torre para que los lugareños pudiesen escuchar la hora oficial mientras realizaban sus labores.
También se ha tenido en cuenta que durante mucho tiempo los habitantes del municipio se han encargado de subir a dar cuerda al reloj y evitar la ruina del edificio, sufragando parte de las frecuentes reparaciones que necesita al ser apreciado como parte fundamental de la localidad y que, por tanto, define por sí mismo un aspecto destacado de la identidad cultural de municipio.
La Torre del Reloj o del Otero se encuentra ubicada en un montículo elevado, lo que permite una espectacular vista de Limpias y las poblaciones cercanas de La Agustina, Carasa, Colindres o Treto.
Además de la edificación, levantada a mediados del siglo XIX, la declaración como BIL abarcará el entorno de la torre, con el fin de garantizar la preservación de sus valores patrimoniales.
Con una altura de 12,20 metros, la Torre del Reloj tiene una planta cuadrada, con muros de mampostería y sillares en esquinales y vanos, y una estructura dividida en tres cuerpos que van decreciendo en altura y sección.
El principal interés de esta edificación radica en el valor que esta torre tuvo para los vecinos de Limpias y alrededores, gracias a la cual podían escuchar la hora oficial. También se la atribuyen otros posibles usos como faro o torre de vigilancia o de comunicación, por su ubicación estratégica y dominante en el territorio.
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