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“En 2023, un 60% de los individuos mayores de 80 años recibirá la vacuna contra la covid-19.”

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MADRID, 15 (SERVIMEDIA)

El 60% de la población mayor de 80 años, más de 1,7 millones de personas, se puso la vacuna adaptada frente a las subvariantes de la covid-19 durante la campaña de vacunación 2023/24, según indica el último informe ‘Gestión Integral de la Vacunación’ (GivCovid19), del Ministerio de Sanidad, que recoge datos del desarrollo de la misma entre el 25 de septiembre y el 11 de diciembre.

El porcentaje de vacunados supera el 77% en Galicia, llega a casi el 75% en Navarra, y pasa del 65% en Castilla y León, La Rioja y País Vasco. También, Asturias y la Comunidad Valenciana están por encima de la media.

En cuanto a las personas de 70 a 79 años, las personas vacunadas superan el 47%, cerca de dos millones de dosis administradas, y destacan las mismas comunidades autónomas como las más avanzadas. En el corte de edad entre 60 y 69 años el porcentaje de personas vacunadas está cerca del 28%.

La estrategia de vacunación por covid-19 en España contó con el apoyo de la Unión Europea que financió, a través de los fondos React EU y Feder, la adquisición de las vacunas.

Las recomendaciones aprobadas por la Comisión de Salud Pública señalan que el objetivo de la vacunación frente a la gripe y la covid-19 es reforzar la protección de las personas más vulnerables y del personal sanitario y sociosanitario para reducir la morbimortalidad y el impacto de estas enfermedades sobre la capacidad de la atención sanitaria y sociosanitaria.

Por ello, teniendo en cuenta la situación epidemiológica actual de la covid-19, el Ministerio aconseja la vacunación durante la temporada de otoño-invierno (2023/24) a las personas de 60 años o más y a personas de 5 años o más internas en centros de discapacidad y residencias. Asimismo, a otras personas institucionalizadas de manera prolongada y residentes en instituciones cerradas, a personas menores de 60 años de edad con condiciones de riesgo, como embarazadas o personas con un alto grado de inmunosupresión, a personal de centros sanitarios y sociosanitarios públicos y privados y a personas que trabajan en servicios públicos esenciales.


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