ASEAF ve “especialmente grave” que haya 557 bebés de menos de 3 años en centros, lo que supone un aumento del 11% respecto a 2021
MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Un total de 17.061 menores tutelados vivían en centros residenciales en 2022, un 5,5% más que el año anterior, cuando había 16.177, mientras que ha caído el acogimiento familiar pasando de 18.455 en 2021 a 18.177 en 2022, lo que supone un descenso del 1,51%.
Así se desprende del Boletín de datos estadísticos de medidas de protección a la infancia y la adolescencia, elaborado por el Observatorio de Infancia, dependiente del Gobierno, y publicado el 29 de noviembre de 2023.
En concreto, respecto al registro de altas, en 2022 aumentaron tanto las altas en acogimiento familiar (un 5,68% más que en el año 2021) como las de acogimiento residencial (un 7,33% más).
En total, en el año 2022 el número de niñas, niños y adolescentes atendidos por el sistema público de protección a la infancia y la adolescencia ha aumentado respecto al año anterior y precedentes,pasando de 49.171 registros en 2020 y 48.357 en 2021 a 51.203 en el año 2022, más aproximado a la cifra de 50.272 registrada en el año 2019.
Por grupos de edad, el informe revela que la cifra de menores acogidos en residencias es más elevada conforme aumenta la edad de los mismos, es decir, a mayor edad, mayor es el número de menores de edad en acogimiento residencial. Así, más de la mitad del total de niños que crecen en centros residenciales (58,22%) tienen entre 15 y 17 años.
Además, de los datos se desprende que ha disminuido el porcentaje de niños de 4 a 6 años (un 1,31% menos); de 7 a 10 años (un 1,96% menos) y de 11 a 14 años (un 0,93% menos). Si bien, ha aumentado en el grupo de 0 a 3 años (un 10,74% más) y en la franja de 15 a 17 (un 10,12% más).
Así, se observa un aumento en el número de niños y niñas menores de 6 años viviendo en centros residenciales que pasa de 1.039 en 2021 a 1.086 en 2022, en contra de lo que dicta la Ley 26/2015, de 28 de julio, de modificación del sistema de protección a la infancia y a la adolescencia.
Según esta ley, “prevalecerá la medida de acogimiento familiar sobre la de acogimiento residencial para cualquier menor, especialmente para menores de 6 años” y “no se acordará el acogimiento residencial para menores de 3 años salvo en supuestos de imposibilidad, debidamente acreditada, de adoptar en ese momento la medida de acogimiento familiar o cuando esta medida no convenga al interés superior del menor”.
A la vista de estos datos, la Asociación Estatal de Acogimiento Familiar (ASEAF) ha manifestado que “sorprende en especial” el incremento que se ha producido en el número de niños y niñas menores de 6 años en residencias y ha tachado de “especialmente grave que haya 557 bebés de menos de 3 años en centros, lo que supone un aumento del 11% respecto a 2021”.
Por ello, ha urgido al nuevo Ministerio de Juventud e Infancia, al frente del cual se encuentra la ministra Sira Rego, a impulsar el acogimiento familiar tras el aumento en casi un 6% del número de niños, niñas y adolescentes que crecen en centros.
Además, esta organización que representa a más de 2.000 familias de acogida, hace un llamamiento urgente a todas las comunidades autónomas. “Es muy urgente que cada comunidad autónoma ponga en marcha su propio plan de desinstitucionalización e impulso del acogimiento familiar, y poder así cumplir con el compromiso adquirido junto al Gobierno en mayo del año pasado, por el que en 2026 ningún menor de seis años tutelado por las administraciones debe vivir en centros de acogida residencial y antes de 2031 tampoco deben hacerlo los menores de diez años”, ha manifestado la presidencia de ASEAF, Helena Escalada.
Sobre el incremento en el número de altas en acogimiento familiar frente al descenso en los datos totales de acogimiento familiar, ASEAF precisa que esto podría significar que se pierden más familias de acogida de las que entran nuevas en el sistema de protección.
En este sentido, desde las 23 asociaciones de ASEAF repartidas por todas las comunidades autónomas, trasladan la necesidad de las familias de acogida de “contar con más apoyos para los niños, niñas y adolescentes que están cuidando”: apoyo domiciliario de educadores, atención psicológica continuada, acompañamiento tanto a los menores como a las familias acogedoras, servicio de mediación para adolescentes y las familias de origen, algún servicio de respiro y mayor coordinación con educación y sanidad.
Por otro lado, ASEAF denuncia un año más, la “falta de transparencia” respecto a los motivos por los que niños, niñas y adolescentes causan baja en el sistema de protección a la infancia.
Según precisan, respecto al año 2021 los datos son, “en parte, esperanzadores” pues hay una reducción del 8% en las bajas por mayoría de edad, y los niños, niñas y adolescentes que retornan con su familia de origen aumentan en un 20%, representando un 15% del total de bajas. No obstante, ASEAF dice que llama la atención el apartado “por otras causas” que registra un incremento alcanzando el 52% del total de bajas.
En cuanto a los acogimientos familiares por tipo de familia, ASEAF destaca que en 2022 siguen predominando los acogimientos en familia extensa (60% del total de acogimientos familiares) sobre los acogimientos en familia ajena (40% del total de acogimiento familiares).
Si bien, destaca que en los dos últimos años se aprecia cómo el acogimiento en familia ajena ha aumentado algo más de un 6% en detrimento del acogimiento en familia extensa. Además, por primera vez, los ofrecimientos en familia ajena, superan a los de familia extensa con un 47% frente al 53%, respectivamente.
Si bien, señala que “sorprende” que, habiendo aumentado los ofrecimientos en familia ajena en un 11% (1.348), en 2022 ha habido un descenso del 8,38% en la cantidad de valoraciones de idoneidad. El 92% del total de valoraciones registradas en el año son idóneas. De las 153 valoraciones de no idoneidad registradas en el año 2022, el 71% corresponden a familia extensa.
ASEAF concluye que hay un claro “cuello de botella” en las administraciones autonómicas y entidades responsables de la gestión del acogimiento familiar. En este sentido, Helena Escalada afirma que “si la razón que se aduce desde hace años para justificar la elevada tasa de institucionalización es que ‘no hay familias’, aquí queda patente que de las familias que había a 31 de diciembre de 2022, aun sin ser suficientes, faltaban 900 familias aún por valorar”.
Por comunidades autónomas, ASEAF señala que “solo en Aragón, Cataluña, País Vasco, Ceuta y Melilla el número de niños, niñas y adolescentes en acogimiento residencial supera al de niños y niñas en acogimiento familiar”. Mientras, destaca que en Canarias, Cantabria, Castilla La Mancha, Cataluña y País Vasco, aumenta el acogimiento familiar con respecto a los datos de 2021.
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