MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La Fundación Madrina y sus voluntarios han repartido regalos de Navidad a 250 niños ucranianos, con motivo de la festividad de San Nicolás, dando inicio así a su campaña ‘Mágica Navidad’ a través de la cual quieren repartir más de 4.000 regalos a niños en situación de extrema pobreza de Madrid, en la Cañada Real Galiana, y en pueblos de la España vaciada, durante estas Navidades.
Este reparto ya empezó el pasado martes 5 de diciembre en un acto navideño con 250 niños ucranianos, con motivo de la festividad de San Nicolás. Según una vieja tradición eslava que se remonta al siglo IV, los menores dejan sus zapatos vacíos al lado de la chimenea o de la ventana, y en la mañana del 6 de diciembre, San Nicolás los llena de regalos. Esta tradición, que también se celebra en otras partes del mundo, es una forma de celebrar la Navidad en Ucrania.
En concreto, más de 250 niños ucranianos menores de 14 años se dieron cita en la explanada del Banco del Bebé de la Fundación Madrina, donde recibieron caramelos y regalos de parte “de San Nicolás y de sus ángeles”.
Según la tradición ucraniana, San Nicolás es un santo obispo cristiano conocido por su generosidad y su amor por los niños, siendo conocido como “protector de los niños”, ya que en vida entregaba regalos a los menores más pobres, salvando a algunos niños de la esclavitud, tal y como señala Madrina.
El evento se inició con un rezo y un minuto de silencio por los niños víctimas de la guerra, y también contó con la actuación de un Coro de niños cantores ucranianos que interpretaron villancicos de la tradición eslava. También se unió a la gala Anastasiia Tomazova, mujer del futbolista ucraniano del Real Madrid Andriy Lunin, que entregó dos camisetas firmadas por el jugador para su sorteo entre los más jóvenes.
Por otro lado, la Fundación Madrina ha rendido homenaje a los más de 2.500 voluntarios que han contribuido con su trabajo en la fundación y les ha entregado un diploma acreditativo de su compromiso social.
Los voluntarios de la fundación distribuyen la ayuda a niños y madres en situación de extrema pobreza, a través de más de un centenar de programas de alimentación e higiene materno-infantil, de atención sanitaria en pediatría y ginecología, de alojamiento en pisos, residencias, hogares de acogida y de realojamiento en zonas del entorno rural, así como de formación en empleo y emprendimiento. Asimismo, y desde el año 2020, Madrina desarrolla a través de voluntarios, labores de Cooperación Internacional y de Emergencia Humanitaria en países como Ucrania, entre otros.
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