Inicio España La estimulación magnética transcraneal, nuevo tratamiento para el trastorno obsesivo compulsivo

La estimulación magnética transcraneal, nuevo tratamiento para el trastorno obsesivo compulsivo

0

MADRID, 30 (SERVIMEDIA)

La estimulación magnética transcraneal (TMS) se presenta como un nuevo tratamiento eficaz y no invasivo para abordar el trastorno obsesivo compulsivo (TOC), según se comprobó en varios ensayos clínicos con pacientes resistentes a la terapia convencional.

Así lo manifestó el jefe del servicio de Psiquiatría del Hospital La Salud de Valencia y profesor invitado en la Universidad Cardenal Herrera-CEU, el doctor Andrés Roig Traver, quien presentó estos avances en el tratamiento del TOC a través de la estimulación magnética transcraneal en el Congreso Nacional de Psiquiatría celebrado en Salamanca.

El TOC afecta entre el 2 y el 3% de la población. En la mayoría de los casos aparece en la adolescencia y conlleva un significativo deterioro en la calidad de vida.

El psiquiatra añadió que, aunque la terapia cognitivo-conductual y los Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina (ISRS) son tratamientos de primera línea, el especialista aseguró que “solo entre el 40 y el 60% de los pacientes responde completamente. La resistencia al tratamiento es común, afectando al 10-15% de los casos, y la limitada accesibilidad a estas terapias es un desafío”.

En este sentido, las técnicas de neuromodulación no invasiva, como la Estimulación Magnética Transcraneal (TMS), ganaron relevancia en el tratamiento de trastornos psiquiátricos, explorando su utilidad específica en el TOC.

ENSAYOS CLÍNICOS

La TMS ejerce un efecto neuromodulador al inducir cambios excitatorios o inhibitorios en las redes cerebrales implicadas en la fisiopatología del TOC. De hecho, un estudio doble ciego con pacientes resistentes al tratamiento aplicó TMS y los resultados fueron prometedores. Tras 25 sesiones en 5 semanas, se observó una mejora significativa y estos efectos se mantuvieron al menos un mes.

Por otro lado, un ensayo clínico multicéntrico aleatorizado demostró también una reducción significativa del trastorno. La tasa de respuesta fue del 38,1%, comparada con el 11,1% en el grupo control, manteniendo las mejoras un mes después del tratamiento.

Asimismo, un seguimiento de 60 pacientes en siete centros reveló una durabilidad de más de un año en el 86,7% de los casos, con un 43,3% manteniendo la mejoría por más de dos años. Se observó una reducción significativa en días improductivos y en el número de días perdidos por semana.


- Te recomendamos -