El principal aliado del primer ministro en el gabinete de guerra le acusa de desdeñar el incidente como una consecuencia indirecta del conflicto
MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
El ministro israelí Benny Gantz, principal aliado del primer ministro, Benjamin Netanyahu, en el gabinete de guerra formado para combatir a Hamás en Gaza, ha exigido al mandatario que investigue inmediatamente la muerte a tiros de un ciudadano israelí a manos del propio Ejército hebreo durante un ataque en Jerusalén el pasado viernes.
Gantz ha repudiado especialmente la respuesta inicial de Netanyahu al incidente, que el primer ministro describió como un desafortunado efecto de la tensión reinante. “Estas cosas pasan cuando distribuyes tantas armas entre la población”, declaró el sábado Netanyahu en referencia a una iniciativa de “protección” defendida entre otros por sus socios ultranacionalistas de Gobierno, como el ministro de Seguridad, Itamar ben Gvir.
En un mensaje en su cuenta de la red social X, Gantz ha avisado a Netanyahu que la muerte de Yuval Castleman “no son ‘cosas que pasan'”. El que fuera ministro de Defensa ha recordado que el ciudadano israelí contribuyó a detener un ataque de Hamás antes de morir a tiros mientras estaba de rodillas, desarmado y con los brazos en alto, claramente identificado.
“Estamos ante un aviso que nos obliga a aprender lecciones que salvarán vidas en un futuro, y hace falta una investigación exhaustiva sobre estas circunstancias, así como en los procedimientos sobre la doctrina imperante del uso de armas”, ha añadido.
Según el diario israelí ‘Yedioth Aharonoth’, Castleman llegó a quitarse la chaqueta para demostrar que no llevaba artefactos explosivos y lanzó su cartera a los militares al grito de “Mirad mi carnet, soy judío” hasta que no pudo hablar porque uno de los disparos le alcanzó en la mandíbula.
Ahora mismo hay dos militares que están siendo investigados, uno de ellos herido durante el incidente. Su compañero será interrogado este domingo por la Policía mientras el hermano de Castleman, Shaked, ha denunciado ante el mismo periódico que lo ocurrido en Jerusalén fue “simplemente una ejecución y no hay forma de verlo de otro modo”.
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