VALLADOLID, 16 (EUROPA PRESS)
El procurador de Unidas-Podemos en las Cortes de Castilla y León y coportavoz de la formación morada a nivel nacional, Pablo Fernández, ha afirmado que este jueves 16 de noviembre es “muy buen día” ante la “muy buena noticia” que va a suponer la previsible investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno de España.
Pablo Fernández ha significado que la investidura de Sánchez supondrá que España no va a estar gobernada por la derecha y por la ultraderecha, a las que ve “absolutamente asalvajadas, echadas al monte y asilvestradas”.
El de Unidas-Podemos se ha referido, en concreto, a actitudes como la de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tras llamar “hijo de puta” al candidato a la investidura como presidente del Gobierno y ha afeado que el Partido Popular haya reafirmado ese insulto al afirmar que es “lo mínimo que le pueden decir”.
“Esto es peligrosísimo, esto está creando un caldo de cultivo muy preocupante y muy grave que está radicalizando a ese electorado ultra del Partido Popular y de Vox”, ha advertido Pablo Fernández en alusión a las consecuencias de la “frustración y de las lágrimas de facha que se están derramando estos días” por parte de algunos representantes políticos institucionales y que “las están canalizando hacia la ira, la frustración y la rabia”.
Pablo Fernández han insistido en que esta dinámica es “muy negativa” para la sociedad española, que, según ha exclamado, va a tener “por suerte” un Gobierno progresista que “va a frenar a esa derecha asalvajada”.
Por otro lado, ha llamado a poner “poner pie en pared” y a decir “alto y claro” que las “vergonzosas, abominables y deplorables” actitudes del vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, y del consejero de Industria, Mariano Veganzones, ambos de Vox, en las sedes del PSOE “no son normales ni representan a Castilla y León”.
“Están deteriorando de forma gravísima la imagen de esta Comunidad”, ha lamentado el de Unidas-Podemos. “Jamás pensé que llegaría a ver a un vicepresidente ultra que se presenta en concentraciones de acoso a un partido político con megáfono en mano gritando noviembre nacional como si fuese un mandril, con todo el perdón a los mandriles”, ha afirmado Fernández que advertido de que estas conductas se están normalizando con la “connivencia” y la “complicidad” del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, como “colaborador necesario de actitudes absolutamente antidemocráticas y que no deberían tener cabida en ningún gobierno”.
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