MADRID, 17 (SERVIMEDIA)
El representante del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, afirmó este viernes que la nueva investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno es “una buena ocasión para que España asuma el rol de centralidad que le corresponde como potencia administradora del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental”.
En un comunicado difundido por el Polisario, Abdulah Arabi responde a la investidura ayer de Pedro Sánchez como Presidente del Gobierno de España tras recibir el voto favorable de la mayoría del Congreso de los Diputados.
Arabi señala que “la ruptura de consenso” sobre el Sahara Occidental “liderada por Pedro Sánchez en la anterior legislatura en relación con la posición histórica mantenida por los distintos gobiernos y las diferentes formaciones políticas en el Estado español, todavía puede ser revertida”.
“Consideramos que este contexto sigue siendo una buena ocasión para que España asuma el rol de centralidad que le corresponde como potencia administradora del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental”, subraya.
Asimismo, advierte de “la inminencia de las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que, entre otros extremos, confirmarán el estatuto distinto y separado del Sahara Occidental respecto de Marruecos”.
Por ello reclama al nuevo Ejecutivo regresar a la postura anterior, lo que “supondría una clara declaración de intenciones en lo que concierne a los valores que defenderá el futuro gobierno que se conforme”.
OBLIGACIONES DE ESPAÑA
“Tras la formación de Gobierno en los próximos días, desde la Representación del Frente Polisario en España seguiremos recordando al Gobierno de España las obligaciones que el Derecho Internacional le impone respecto al Sahara Occidental”, reitera.
Asimismo, “permaneceremos a la absoluta disposición de todas aquellas formaciones políticas y sociales que deseen llevar a cabo iniciativas que contribuyan al efectivo ejercicio del derecho a la autodeterminación e independencia del pueblo del Sahara Occidental”, asevera.
Arabi defiende que el Polisario, “único y legítimo representante del pueblo del Sahara Occidental” basará sus relaciones políticas e institucionales “en el escrupuloso respeto al sistema democrático”.
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