ZARAGOZA, 30 (EUROPA PRESS)
La Dirección General de Protección a los Consumidores y Usuarios del Gobierno de Aragón, ante la próxima celebración de Halloween, ha pedido precaución ante la compra de productos eminentemente de uso infantil con y seguir todos los consejos de seguridad antes de elegir un producto.
Los disfraces destinados a niños menores de 14 años son considerados como juguetes, elevando de ese modo el nivel de exigencia en materia de seguridad. Como medida de prevención, la inspección de consumo de los tres Servicios Provinciales de Ciudadanía y Derechos Sociales trabaja durante todo el año vigilando que se cumplen las normas.
En lo que va de año, en la campaña de Halloween, se han realizado un total de 577 actuaciones inspectoras que se han materializado en bazares y tiendas especializadas del sector, algo que ha dado como resultado 11 productos notificados en la red de alerta a nivel nacional, ha informado el Gobierno de Aragón.
La mayoría de ellos se corresponden con disfraces, el resto se trata de complementes o adornos como máscaras, diademas o bisutería. Por tratarse de productos íntimamente relacionados con Halloween, como calabazas, calaveras o fantasma, entre otros, se han inmovilizado un total de 4.116 productos.
Estas actuaciones se realizan para comprobar la inexistencia de los productos notificados desde finales del año pasado a través de la Red de Alerta, así como por actuaciones de oficio donde los inspectores han detectar que un determinado producto no cumplía con el etiquetado.
El riesgo que se suele asociar a este tipo de productos guarda relación con cordones o lazos excesivamente largos, una mayor probabilidad de inflamabilidad, dificultades a la hora de una adecuada respiración o la presencia de piezas pequeñas, en el caso de disfraces para niños menores de tres años.
RECOMENDACIONES
El director general de Protección de Consumidores y Usuarios, Antonio Villacampa, ha recordado que “ante todo, debe elegirse un disfraz adecuado a la edad de la persona que lo vaya a usar y prestar especial atención si va dirigido al público infantil. Cuerdas y lazos excesivamente largos, máscaras muy ajustadas o piezas pequeñas son los riesgos que mayormente presentan estos tipos de productos”
La venta de algunos de los productos es específica de estas fechas, “tendrán que informarnos igualmente de los plazos y condiciones de las devoluciones, si la compra es en un establecimiento físico”, ha afirmado.
Mientras que en el comercio electrónico este periodo se fija por ley y se dispone de 14 días para la realización de la devolución, “es lo que conocemos como derecho de desistimiento”, ha expuesto Villacampa.
CONSEJOS
En cuanto a los consejos a tener presente, desde la Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios, han sugerido leer con atención la etiqueta que llevan los disfraces, puesto que informa sobre la edad recomendada, los consejos de seguridad y la empresa responsable del producto, entre otros datos relevantes.
Los disfraces de niños son considerados juguetes, han remarcado, de ahí que sea requisito imprescindible que conste el marcado CE, prueba de conformidad de que el fabricante ha tenido presentes los requisitos de seguridad.
Asimsimo, han recomendado comprobar que son resistentes al fuego o poco inflamables. Las pelucas, barbas y complementos de similares características suelen presentar un alto grado de inflamabilidad. No conviene que sean utilizados por los niños y, en todo caso, ha de tenerse presente esa posibilidad evitando los cigarrillos, mecheros o aproximarse a estufas y otras fuentes de calor.
Las caretas y antifaces deben ir provistos de unos agujeros de ventilación adecuados para que el niño pueda respirar bien, puesto que las máscaras muy ajustadas y sin orificios de ventilación pueden perturbar la respiración. Además, todo lazo o cuerda que quede libre en la parte alta del disfraz, puede suponer un riesgo de estrangulamiento para el niño por lo que evitaremos esos adornos.
Los disfraces para niños menores de 36 meses no deben contener elementos pequeños que puedan ser motivo de atragantamiento y en caso de botones, deben ir bien fijados. En todo caso, conviene recordar que ante cualquier compra hay que conservar el ticket o justificante para poder ejercer el derecho ante una posible reclamación.
RECLAMACIONES
En el supuesto de que haya que realizar una reclamación, en primer término, hay que trasladarla al responsable del servicio de atención al cliente de la empresa.
Los establecimientos físicos dentro del territorio aragonés deben disponer de Hojas de Reclamaciones del Gobierno de Aragón y ponerlas a disposición de las personas consumidoras que las soliciten.
Independientemente de la modalidad de compra, están obligados a responder en el plazo de un mes y, en caso de que la respuesta no sea del agrado del usuario, o de no recibirla, se puede elevar ante los servicios provinciales de Consumo.
Cualquier consulta puede plantearse ante las Oficinas Municipales y Comarcales de Información al Consumidor, Asociaciones de Consumidores y dependencias de la Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios del Gobierno de Aragón.
A su vez, está a disposición de los consumidores la dirección de correo electrónico ‘consultaconsumo@aragon.es’ , el teléfono ‘900 12 13 14’, para llamadas desde teléfonos fijos, y las redes sociales Facebook y Twitter en ‘@ConsumoAragon’.
- Te recomendamos -