Las autoridades de la Franja, controlada por Hamás, denuncian “un holocausto” y afirman que hay 1.700 desaparecidos entre los escombros
MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El balance de víctimas mortales a causa de las tres semanas de bombardeos del Ejército de Israel contra la Franja de Gaza tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha aumentado a más de 7.300, según han indicado este viernes las autoridades del enclave palestino, controlado por el grupo islamista, que han afirmado que entre los fallecidos hay más de 3.000 niños.
El portavoz del Ministerio de Sanidad gazatí, Ashraf al Qidra, ha detallado en una rueda de prensa desde Gaza que hasta ahora se ha confirmado la muerte de 7.326 personas, incluidos 3.038 niños, mientras que 18.967 han sufrido “heridas de diversa consideración”. El balance incluye los datos de “41 masacres cometidas en las últimas 24 horas”, que se han saldado con 298 “mártires”, “la mayoría de los cuales eran desplazados en el sur de la Franja, que la ocupación israelí describe como segura”.
“La ocupación israelí eleva de forma deliberada el coste del holocausto contra Gaza por decenas”, ha dicho Al Qidra, que ha detallado que las autoridades cuentan con informes sobre 1.700 personas desaparecidas bajo los escombros de los edificios destruidos en los ataques aéreos, incluidos 940 niños, según un comunicado publicado por el Ministerio de Sanidad gazatí a través de su cuenta en la red social Facebook.
Asimismo, ha manifestado que “las violaciones israelíes contra el sistema sanitario han causado el martirio de 104 trabajadores sanitarios y la destrucción de 25 ambulancias”, al tiempo que ha denunciado “ataques deliberados” contra 57 instituciones sanitarias. Al menos doce hospitales y 32 centros sanitarios están fuera de servicio por los bombardeos o la falta de combustible, según Al Qidra.
“La ausencia de la entrega inmediata de combustible a los hospitales amenaza la vida de miles de heridos y enfermos que necesitan atención médica”, ha señalado, al tiempo que ha argumentado que “la ocupación israelí utiliza el bloqueo a la entrega de suministros médicos y combustible a los hospitales como un arma adicional para expandir el Holocausto cometido contra Gaza”.
En este sentido, ha pedido a la comunidad internacional “medidas urgentes y efectivas para salvar del colapso al sistema sanitario” en la Franja, al tiempo que ha solicitado a “los hermanos de Egipto” que “abran el paso de Rafá con normalidad para la entrega de ayuda médica, combustible y equipos médicos, así como para permitir la salida de los heridos y los enfermos”.
Al Qidra ha cargado además contra Estados Unidos por las dudas expresadas por el presidente estadounidense, Joe Biden, sobre los balances de víctimas y ha recordado que durante la jornada del jueves se publicaron los nombres y datos personales de más de 6.700 muertos que figuraban en los registros a fecha del miércoles. “Esto lo pone en una posición vergonzosa ante su pueblo y el mundo y demuestra que no es una parte neutral”, ha argumentado.
“No hay nada que evite que cualquier parte neutral entre a Gaza para ver el horror de las masacres contadas por las víctimas sobre niños, mujeres y familias que fueron completamente aniquiladas durante el Holocausto que aún está siendo cometido por la ocupación israelí”, ha manifestado Al Qidra, que ha pedido a la comunidad internacional que pregunte a Israel “por qué forzó a las instituciones internacionales a abandonar sus posiciones en el norte de Gaza y dirigirse al sur, salvo para ocultar los hechos y controlar su trabajo, que se supone que debe ser puramente humanitario”.
Las palabras de Al Qidra llegan después de que Biden afirmara el miércoles “no tener constancia” sobre “si los palestinos están diciendo la verdad sobre cuántas personas han muerto”. “No tengo confianza en las cifras que los palestinos están usando”, manifestó, si bien se mostró convencido de que hay “inocentes” entre las víctimas de los ataques de Israel.
Por su parte, Jonathan Conricus, uno de los portavoces del Ejército de Israel, pidió el jueves desconfiar de los balances de víctimas publicados por las autoridades de Gaza y sostuviera que “no se puede dar credibilidad a una organización que miente e infla constantemente las cifras de civiles muertos y esconde la muerte de operativos (de Hamás y otros grupos armados palestinos)”.
Al balance de muertos a causa de los bombardeos de Israel en Gaza se suman más de cien muertos en Cisjordania a causa de las operaciones llevadas a cabo por el Ejército de Israel y los ataques por parte de colonos desde los ataques del 7 de octubre, que dejaron cerca de 1.400 muertos y más de 220 secuestrados en territorio israelí.
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