VALLADOLID, 24 (EUROPA PRESS)
‘Música’, el largo más reciente de la cineasta alemana Angela Schanelec (Aalen, 1962) que resultó ganadora del Oso de Plata al mejor guion en Berlín este año, llegará este miércoles a la Sección Oficial de la 68 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), junto al trepidante filme ‘El rapto’ y la nominada a la Palma de Oro en Cannes por Mejor Película ‘Las cuatro hijas’.
De esta manera, el Teatro Calderón de la capital vallisoletana acogerá este miércoles el estreno nacional de esta coproducción franco-serbio-alemana en la que Schanelec reformula el mito del rey de Tebas con una historia sobre un joven adoptado (Jon) que, tras cometer un homicidio e ingresar en la cárcel, comienza una relación con una funcionaria (Iro) con la que comparte, sin saberlo, lazos familiares.
A partir de entonces, todo parece indiar que Iro busca su presencia, se preocupa por el joven y le graba música. Desde ese momento, por cada pérdida que Jon sufre ganará algo a cambio, por lo que en vez de quedarse ciego, vivirá su vida de una manera más llena que nunca.
SECUESTROS Y DESAPARICIONES
Por su parte, ‘El Rapto’ (2023), también se presentará este miércoles en la principal sección de la Semana Internacional de Cine de Valladolid.
Dirigida por Marco Bellocchio y con una duración de 125 minutos, este largometraje de coproducción italo-franco-alemana es un drama ambientado que parte de la historia real del secuestro, por parte del papado, de un niño judío en 1858, para arremeter contra la corrupción y el antisemitismo y, de paso, ofrecer una cinta trepidante, de un pulso narrativo firme y directo.
Nacido en Piazencia (Italia), Bellocchio es uno de los principales renovadores del cine europeo. Desde ‘Las manos en los bolsillos’ (1965), su primer largometraje (premiado en Locarno), ha construido una obra contestataria y comprometida en la lucha contra el conformismo y la moral burguesa.
En su extensísima carrera destacan títulos como ‘Marcha triunfal’ (1976), ‘Salto en el vacío’ (1980), ‘La condena’ (1991), ‘Buenos días, noche’ (2003), ‘Sangre de mi sangre’ (2015), ‘El traidor’ (2019) o la miniserie ‘Exterior noche’ (2002), que han acaparado multitud de premios en los principales festivales internacionales.
También ha recibido premios honoríficos por toda su carrera en Venecia (2011), Locarno (2015) y Cannes (2021). Su trabajo ha sido objeto de decenas de retrospectivas en todo el mundo, incluida una en el MoMA (Nueva York) en 2014 para conmemorar el cincuenta aniversario de su carrera cinematográfica
VIAJE “ÍNTIMO”
La última película que se presentará este miércoles en la Sección Oficial del festival vallisoletana será ‘Las cuatro hijas’, filme dirigido por Kaouther Ban Hania que se estreno en la 76 edición del Festival de Cannes, cita en la que estuvo nominada a la Palma de Oro por Mejor Película.
Así, la última película de la directora tunecina se centra en la vida de Olfa, tunecina y madre de cuatro hijas, que se desarrolla entre luces y sombras. Un día, sus dos hijas mayores desaparecen.
Para suplir su ausencia, la directora Kaouther Ben Hania recurre a actores profesionales y establece un extraordinario mecanismo cinematográfico destinado a revelar la historia de Olfa y sus hijas, por lo que configura un viaje “íntimo que rebosa esperanza, rebeldía, violencia, transmisión intergeneracional y sororidad, y que pone en cuestión los cimientos de nuestras sociedades”.
Según explica la cineasta en el dossier de prensa, este proyecto arrancó en 2016, cuando estaba terminando ‘Zaineb odia la nieve’, un documental al que dedico seis años de su vida y en el que filmó la vida de una adolescente.
En una emisora de radio, escucho a Olfa contar la trágica historia de sus hijas. Aquello le “intrigó y conmovió”, reconoce la directora de ‘Las cuatro hijas’, puesto que “una vez más, se trataba de la historia de una madre y de sus cuatro hijas adolescentes”.
Asimismo, Ben Hania asegura que Olfa le “fascinó desde el principio”, en tanto en cuanto vio en ella un personaje “muy potente para el cine”. “Era la encarnación de una madre con todas sus contradicciones, sus ambigüedades, sus zonas problemáticas”, asevera la directora, al tiempo que explica que su historia, “compleja y aterradora”, le “perseguía y estaba muy interesada en explorarla y comprenderla”, aunque “no sabía cómo lo iba a hacer”.
En el momento en que Ben Hania contactó con Olfa, su historia ya había aparecido muchas veces en la radio y la televisión, si bien hay que entender que, en aquel momento, este tipo de historias eran “habituales”. “Lo que me interesó de Olfa fue que su historia trataba de mujeres, de una madre y unas hijas”, remarca la cineasta.
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