Inicio España Más de 43 millones de niños desplazados por el cambio climático entre...

Más de 43 millones de niños desplazados por el cambio climático entre 2016 y 2021, según Unicef

0

MADRID, 06 (SERVIMEDIA)

Un total de 43,1 millones de niños se han convertido en desplazados internos en 44 países como consecuencia de los desastres meteorológicos entre 2016 y 2021, lo que equivale a unos 20.000 desplazamientos infantiles diarios.

Así consta en el informe ‘Niños y niñas desplazados por el cambio climático’, elaborado por Unicef y cuyas conclusiones se publicaron este viernes. Este es el primer análisis mundial del número de menores de edad desarraigados de sus hogares entre 2016 y 2021 por inundaciones, tormentas, sequías e incendios forestales, y ofrece las previsiones para los próximos 30 años.

El informe pone de manifiesto que China y Filipinas son dos de los países donde se registraron las cifras absolutas más elevadas de desplazamientos infantiles como consecuencia de su exposición a fenómenos meteorológicos extremos, al enorme volumen de su población infantil y a los progresos en materia de alerta temprana y capacidad de evacuación.

Si el análisis se ciñe al tamaño de la población infantil, los chavales que viven en pequeños países insulares, como Dominica y Vanuatu, fueron los más expuestos a tormentas; mientras que los residentes en Somalia y Sudán del Sur soportaron mayor número de inundaciones.

EXPERIENCIA ATERRADORA

Ante esta situación, la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, expresó lo siguiente: “para cualquier niño o niña es aterrador cuando un feroz incendio o una inundación se abaten sobre su comunidad”. Además, añadió que “para los que se ven obligados a huir, el miedo y las consecuencias pueden ser especialmente devastadores, ya que están preocupados por si podrán volver a casa y retomar la escuela o si se verán obligados a trasladarse de nuevo”.

En ese sentido, indicó que “a medida que aumenten los efectos del cambio climático, también lo harán los desplazamientos provocados por el clima” y denunció que “estamos actuando con demasiada lentitud” a pesar de que “disponemos de las herramientas y los conocimientos necesarios para responder a este problema cada vez mayor para los niños y niñas”.

El informe de Unicef pone de manifiesto que las inundaciones y las tormentas causaron 40,9 millones de desplazamientos infantiles, el 95% de los habidos entre 2016 y 2021; mientras que las sequías provocaron más de 1,3 millones de desplazamientos, siendo Somalia volvió a ser uno de los países más afectados, y los incendios causaron 810.000 desplazamientos, más de un tercio de los cuales tuvieron lugar en 2020, con Canadá, Israel y EEUU como los países más castigados.

La organización de protección de la infancia de la ONU alerta de que “los más jóvenes están especialmente expuestos al riesgo de desplazamiento en países que ya se enfrentan a crisis superpuestas como los conflictos y la pobreza, y donde las capacidades locales para hacer frente a cualquier desplazamiento adicional de niños y niñas son bastante limitadas”.

El texto subraya que Haití corre un “alto riesgo de desplazamiento infantil” por los desastres naturales y que en Mozambique las comunidades más pobres, incluidas las de las zonas urbanas, son las más afectadas.

PREVISIONES

El informe prevé que en los próximos 30 años las inundaciones fluviales podrían desplazar a casi 96 millones de niños, los vientos ciclónicos a 10,3 millones y las tormentas a 7,2 millones. A pesar de ello, Unicef avisa de que como consecuencia de la frecuencia y la gravedad de los fenómenos meteorológicos causados por el cambio climático “las cifras reales serán casi con toda seguridad más elevadas”.

Ante esta situación, Unicef insta a proteger a los menores de edad de los desastres y los desplazamientos por el cambio climático. Además, se debe prepararlos para “vivir en mundo de cambios climáticos mediante la mejora de su capacidad de adaptación y resiliencia”. También se debe priorizar a los menores en “la acción y la financiación en materia de catástrofes y clima, en la política humanitaria y de desarrollo, y en las inversiones para prepararse ante un futuro que ya está aquí”.


- Te recomendamos -