MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Letonia ha anunciado este martes el cierre de uno de sus dos pasos fronterizos con Bielorrusia en un intento por frenar el flujo migratorio procedente del país vecino.
“Con el fin de garantizar la seguridad de la frontera estatal y prevenir una amenaza para el Estado asociada a la migración ilegal, se ha suspendido el trabajo del puesto de control de Silene en la frontera entre Letonia y Bielorrusia”, han indicado las autoridades.
Así, el personal del puesto fronterizo de la ciudad de Silene será reasignado para vigilar la frontera en un momento de máxima tensión desde 2021 debido a la llegada de migrantes, según informaciones de la emisora de radio LSM.
El Gobierno ha señalado que dejará abierto tan solo un paso fronterizo para evitar que la situación afecte negativamente al transporte de carga, así como los viajes urgentes y necesarios a nivel laboral o humanitario, además de cuestiones de fuerza mayor.
En 2021, Letonia, Polonia y Lituania se enfrentaron a una grave crisis política cuando miles de personas comenzaron a cruzar la frontera desde Bielorrusia, que ha respaldado su apoyo a Rusia desde el inicio de la invasión de Ucrania. Por ello, ha sido acusada de permitir de forma deliberada el tránsito de personas hacia otros países a través de su frontera con el objetivo de ejercer una mayor presión sobre las fronteras de los países de la UE.
El Servicio Estatal de Guardia de Fronteras de Letonia ha impedido el intento de 894 personas de cruzar ilegalmente la frontera entre Letonia y Bielorrusia durante la última semana.
Hasta ahora, en la frontera entre Letonia y Bielorrusia había dos puestos de control en las carreteras (Silene y Paternieki) y uno en la vía férrea. Tres puestos de control están cerrados.
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