MADRID, 03 (SERVIMEDIA)
La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) reclamó este lunes que el nuevo Gobierno que se conforme tras las negociaciones políticas corrija la tendencia de incrementos tanto fiscales como de cotizaciones sociales “que se han institucionalizado durante estos últimos años, suponiendo un gran deterioro de la competitividad, especialmente de las pymes, que no han logrado recuperarse totalmente tras la pandemia y la crisis inflacionaria”, al tiempo que exigió que se reduzcan las cargas burocráticas.
Estas son algunas de las prioridades que Cepyme plantea a los partidos políticos en un decálogo publicado este lunes, en el que la confederación pide que se “piense en la empresa a la hora de legislar” y que se busque un “marco fiscal, laboral y administrativo más amable para las pymes, de forma que se facilite una mayor inversión como sustento de la actividad productiva, el crecimiento empresarial, el empleo y el estado de bienestar”.
“La ganancia de tamaño es un elemento crucial para la pyme española, que se ve amenazado por las fuertes subidas de costes fiscales y laborales que cohabitan con la elevada inflación y la escalada de los tipos de interés”, avisa esta patronal, que defiende que el crecimiento económico de los últimos meses “no debe desviar la atención de los desafíos a los que se enfrentan las pymes”.
Según Cepyme, las pequeñas y medianas empresas soportan un alza de costes superior al 25% en los últimos dos años y, pese a circunstancias adversas como son los rangos históricos de inflación y el alza de los tipos de interés, siguen manteniendo la contratación de trabajadores en un contexto reciente de alzas impositivas y subidas continuas de las cotizaciones. “Para ello es imprescindible optar, al menos, por una mayor contención y eficiencia del gasto público, ya que su incremento deriva habitualmente en nuevas subidas de impuestos”, abunda.
En este sentido, sostiene que “la presión fiscal está en máximos históricos, lo que detrae capacidad de ahorro e inversión y mina las posibilidades de que las pymes españolas ganen tamaño, un elemento esencial para su competitividad, supervivencia y el sostenimiento del empleo”.
Además, esta patronal llama la atención especialmente sobre el incremento de las cotizaciones sociales en los últimos años, tanto de las bases -más del 50% las mínimas y cerca de un 20% las máximas- como de los tipos -los terceros más elevados de la UE-, que, en su opinión, tienen un “mayor impacto” sobre las pymes, debido a su reducido tamaño y al mayor peso de los costes laborales en estas empresas.
PENSIONES
Por otra parte, insta a hacer una “reflexión” sobre la sostenibilidad de las pensiones, previa evaluación de los últimos cambios introducidos, con el objetivo de garantizar la viabilidad del sistema de Seguridad Social, así como incentivar el ahorro complementario.
Entre otras medidas, Cepyme también pide que se retiren obstáculos normativos, que se flexibilice la aplicación de los escalones regulatorios que limitan el crecimiento de las pymes, que se fomenten las fusiones y adquisiciones, así como evaluaciones -el Test PYME- que calculen el impacto de las normas en la empresa tipo española.
En materia laboral, la organización aboga por fomentar el diálogo social y la negociación colectiva como ejes de la modernización del mercado laboral, así como por activar mejoras en las políticas activas y pasivas de empleo. Igualmente, considera “necesario” hacer un mayor énfasis en la formación profesional, la recualificación y la formación continua, para “enfrentar el problema de la falta de mano de obra que aqueja a sectores clave del tejido productivo español”.
Asimismo, urge a avanzar hacia la “unidad de mercado”, simplificar normativas y reducir cargas burocráticas.
En relación con la lucha contra la morosidad, Cepyme ve “urgente” una política activa y multidisciplinar que ayude a disipar la morosidad tanto pública como privada, ya que supone una “gran merma de liquidez para las empresas”.
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