CEUTA, 24 (EUROPA PRESS)
Agentes del Servicio Marítimo y los Grupos Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil de Ceuta han intervenido durante la madrugada de este jueves las redes de enmalle a la deriva, un arte prohibido tanto en aguas jurisdiccionales europeas como en el resto del mar Mediterráneo, que utilizaba un pesquero con bandera de Marruecos junto al litoral de la ciudad autónoma.
La Comandancia de la Benemérita de Ceuta ha explicado en un comunicado que sus unidades localizaron en la bahía sur de la ciudad, cerca de la ensenada del Sarchal, una embarcación de pesca con bandera del Reino alauita y cuatro tripulantes a bordo que estaba faenando con un arte “prohibido por el daño que ocasiona a los fondos marinos”.
Por ello se instó a la tripulación a la recogida de las redes y a su traslado a la base del Servicio Marítimo del Instituto Armado, donde tras poner los hechos en conocimiento del Centro de
Seguimiento de Pesca de la Subdirección General de Vigilancia Pesquera y Lucha contra la Pesca Ilegal del Ministerio de Agricultura se acordó su intervención.
La empresa pública Tragsa se encargó de levantar la correspondiente acta de retirada y el barco pudo continuar rumbo hacia su puerto base.
El Gobierno central ordenó en 2020 que, en caso de detectarse pesqueros marroquíes faenando con redes de enmalle a la deriva en aguas españolas, “se proceda a la retención de la embarcación y al decomiso de las artes”. En caso de localizarse en aguas mediterráneas fuera de soberanía nacional, la Guardia Civil debe “tomar los datos necesarios para realizar un informe de avistamiento para su remisión a la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) y Marruecos”.
En septiembre de 2022 el Ejecutivo de Pedro Sánchez se congratuló por que “las medidas en vigor resultan suficientemente efectivas” y opinó que “no se considera necesario modificarlas ni tomar otras adicionales”, ya que “tras los incidentes en aguas territoriales en torno a Ceuta de junio de 2021, durante los cuales se decomisaron cinco redes de enmalle de deriva”, hasta hace un año “no se volvieron a detectar este tipo de hechos”.
Las redes de enmalle de deriva pueden desplazarse y operar en la superficie del mar o cerca de ella para capturar especies de peces que se encuentran en la parte superior de la columna de agua y están prohibidas por la Comisión Europea en todas las aguas jurisdiccionales de la UE.
Según organizaciones conservacionistas como Verdemar-Ecologistas en Acción, ese tipo de útiles “destruye los hábitats marinos, pone en peligro la fauna marina y compromete la pesca sostenible”. Su uso pone en riesgo “mamíferos marinos, tortugas de mar y aves marinas, en su mayoría protegidos”.
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