PAMPLONA, 22 (EUROPA PRESS)
La graduada en Maestro en Educación Primaria (euskera) por la Universidad Pública de Navarra (UPNA) Zahra Ballouk Guourar ha realizado su Trabajo Fin de Grado sobre las necesidades de las familias adoptivas y sus hijos e hijas en el ámbito escolar. Dirigido por el profesor del Departamento de Ciencias Humanas y de la Educación Javier Monzón González, el trabajo se ha realizado en colaboración con la Asociación de Familias Adoptivas de Navarra (AFADENA) y se ha centrado en el punto de vista de estas últimas.
En concreto, el objetivo del trabajo era el de conocer las demandas sociales y curriculares de los niños, recabar las opiniones de las familias adoptivas en cuanto a sus necesidades y proponer un protocolo de atención específico. Como se recoge en el estudio, las familias subrayan la necesidad de trabajar, en el ámbito escolar, una serie de aspectos que pueden verse afectados por la desprotección vivida por estos niños de manera previa a la adopción, como son la autoestima, su situación socioemocional, la atención y los problemas de lenguaje.
Además, según indican, este alumnado necesita tener un vínculo estable con el profesorado y no recibir juicios de ningún tipo por su situación. “Es muy importante reforzar los vínculos entre estudiantes y entre alumnado y profesorado para facilitar esas relaciones, a través de dinámicas de cohesión”, relata Zahra Ballouk.
Las familias remarcan, asimismo, la necesidad de ser escuchadas, de saber que su hijo está recibiendo una atención integral y de asegurarse de que existe, por parte del centro, una comprensión de sus circunstancias y necesidades. “En definitiva, las familias deberían tener una presencia en la escuela que vaya más allá de la mera información sobre su hijo o hija”, explica la autora del trabajo.
“La colaboración y la comunicación con la familia es fundamental, pues de esa manera se puede coordinar y ajustar la intervención en el aula, siempre con una perspectiva inclusiva. Mantener una comunicación fluida puede facilitar tanto la intervención como la evaluación”, apunta.
Por último, las familias subrayan la necesidad de que el profesorado y otros profesionales del centro que trabajan con los menores tengan la formación adecuada, así como que conozcan la implicación y la repercusión que puede tener la vivencia temprana de la adversidad en el aprendizaje y en la socialización del alumnado adoptado.
PROTOCOLO PARA UNA ESCUELA MÁS INCLUSIVA
Como se ha indicado, Zahra Ballouk también apunta en su trabajo la necesidad de crear una propuesta de protocolo de intervención en centros escolares para alumnado adoptado que tenga en cuenta las necesidades de la familia y las del niño, y que también contemple la necesaria cooperación entre las partes implicadas. Este protocolo es preciso, según explica, porque la mayoría de las familias encuestadas no sienten que la intervención que se les ofrece desde los centros sea la adecuada.
“Al igual que a los niños y niñas, las familias adoptivas también necesitan ser escuchadas, comprendidas y no juzgadas ni criticadas por la sociedad. Por ese motivo, lo que esperan es una escuela inclusiva en la que todo el alumnado sea aceptado, respetado, comprendido, valorado y acogido”, subraya la egresada por la UPNA.
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