LOGROÑO, 18 (EUROPA PRESS)
El sindicato UGT ha mostrado este martes su “preocupación” por el elevado aumento de casos de trata con fines de explotación laboral que se vienen observando tanto en el servicio doméstico como en el sector de los cuidados.
Algo a lo que ha sumado la necesidad de ahondar más en los casos que se producen en el sector agrario, especialmente en las grandes campañas de temporada. Casos, además, que afectan de manera especial a personas migrantes, y, en el porcentaje más alto del total, a mujeres y niñas.
Así lo ha puesto de manifiesto la responsable del Departamento de Migraciones Confederal de UGT, Ana María Corral, quien, junto con la patrona del Instituto Sindical de Cooperación al Desarrollo (ISCOD) La Rioja, Ana Victora del Vigo, han presentado esta mañana el manual de comunicación ‘Contra la trata con fines de explotación laboral’.
Una guía cuyo principal objetivo es “convertirse en un instrumento para los medios de comunicación riojanos y sus profesionales a la bora de abordar el trabajo forzoso y las figuras afines”.
Como ha reseñado Del Vigo, “se trata de desplazar el foco mediático de las personas extranjeras en situación irregular, así como sus condiciones de vida y las del resto de víctimas, mostrando al resto de actores implicados, a todas las personas que se lucran de estas situaciones y por tanto delinquen”.
A ello ha unido igualmente “dejar de reproducir estereotipos que estigmatizan a las personas migrantes, que son las principales víctimas, y también dejar de invisibilizar el contexto social, político y económico, así como las distintas desigualdades de género, de origen, de raza, que hacen posible estos fenómenos dentro y fuera de nuestro país”.
En palabras de Corral, “se trata de un tema de los más lacerantes que se pueden abordar, porque va contra los derechos humanos”, un manual con el que se pretende distinguir entre “las diferentes formas de esclavitud laboral”.
Algunas de ellas, ha explicado, están reconocidas en el Código Penal español, como la trata de seres humanos para explotación laboral, sexual, matrimonio forzado o tráfico de órganos, y otras, como la servidumbre, la propia esclavitud o el trabajo forzoso, que en este momento, y pese a algún conato de norma en este sentido, no lo están.
Ha hecho referencia la responsable sindical a cifras, “que son siempre muy cortas para lo que luego es la realidad”, y ha citado los más de 27 millones de personas en trabajo forzoso recogidas por la OIT, “un 11% de ellas mujeres y niñas y más de la mitad, contra todo lo que se pueda pensar, en países con rentas medias y altas”.
En el caso de Europa, el Eurostat indica que, en 2021, se registraron más de 7.000 víctimas de este tipo de trata “que están identificadas como tal, un número realmente corto”. Y, en el caso de España, donde solamente la Policía Nacional puede identificar a los afectados como víctimas, “hay un muy bajo nivel de esa identificación”.
Algo que, además, “se ha dificultado en los dos o tres últimos años con la pandemia, la digitalización y el desplazamiento de seres humanos ocasionado por la guerra de Ucrania, sobre todo entre niños y niñas que viajan solos”.
Así, de acuerdo con datos de 2022 del Ministerio del Interior, se ha investigado a más de 11.700 trabajadores en riesgo en casi 5.800 inspecciones; en La Rioja, se investigó a 95 trabajadores en 18 inspecciones.
La “preocupación” crece en el caso de los casos de trata en el servicio doméstico y el sector de los cuidados, porque, al darse en un entorno privado, la inspección no puede acceder con facilidad. Por ello, desde el Consejo de Europa, entre otras recomendaciones para España en este campo, recomienda más inspecciones para más detección de casos, así como más sensibilización.
“Hay cierta negligencia en los casos de explotación laboral o de trabajo forzoso, en lo que tendríamos que pensar que se están violando los derechos humanos, porque ya no estamos hablando solo de derechos laborales, estamos hablando de derechos humanos, de las víctimas de esos casos de trabajo forzoso, de servidumbre, de esclavitud o de trata con fines de explotación laboral”, ha reseñado Corral.
En sus palabras, esta situación “también hace daño a la sociedad en su conjunto, en la medida en la que tenemos que convivir con estas formas de esclavitud moderna, que además las vemos, en muchos casos están a la vista”.
Casos que, incluso, “causan, un daño tremendo en la economía, en materia de competencia desleal, en materia de tributos, en materia de contribución, en contribución al bienestar social, pero sobre todo, sobre todo, es una violación de los derechos humanos”.
Por eso, y contando con la necesidad de “refozar” la sensibilización, desde ISCOD se espera que el manual presentado hoy “guíe, oriente y proporcione herramientas al colectivo profesional periodístico para mejorar el tratamiento informativo de un tema tan complejo coo es el trabajo forzoso”.
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