VALLADOLID, 28 (EUROPA PRESS)
El Barrio de la Victoria de Valladolid, dentro del programa de sus fiestas, celebra este viernes, 30 de junio, en la Plaza de la Solidaridad el II Festival de los Motines del Pan, que contará con la actuación bandas como El Nido, Cabeza de Gallo, DelaMesetaDJ y Rastrojo Brothers.
“El año pasado celebramos la primera edición y fue un éxito, contamos con bandas y artistas locales como Andrea Garcy, Carlos Soto o Guille Jové que actuaron ante más de 400 personas en la plaza de la Armonía”, cuentan desde la organización del festival.
Este año se mudan a la Plaza de la Solidaridad, más grande y con mejores instalaciones, pero con el mismo espíritu: contribuir a recuperar la memoria de los Motines del Pan ofreciendo música de calidad con entrada gratuita.
La banda burgalesa El Nido, compañeros de La M.O.D. A en el Wizink Center de Madrid, son los cabezas de cartel de esta segunda edición que cuenta, además, con la banda vallisoletana Cabeza de Gallo, que viene de grabar hace pocos meses en los Conciertos de Radio3.
El broche de oro lo pondrá DelamesetaDJ, un nuevo talento local que fusiona el folklore popular castellano con la electrónica; y el pistoletazo de salida correrá a cargo de los Rastrojo Brothers hacia las 20.00 horas, un dúo de hermanos oriundos del Valle del Baztán (Navarra) que presentará su propuesta de folk-rural para todos los públicos.
Organizado por la Asociación Cultural Abrigaño y auspiciado por la Asociación de Vecinos Los Comuneros, el festival encara su segunda edición con la esperanza de mantenerse como una fecha clave en el calendario festivo de los vecinos de la ciudad.
El objetivo -cuentan desde Abrigaño- es dar espacio a la historia de Castilla más allá de la festividad de Villalar, y es que, según explican, “los Motines del Pan ocurrieron en junio de 1856 como consecuencia del proceso de industrialización del campo, más concretamente, con el surgimiento de una burguesía en torno al mercado harinero y el consiguiente proletariado que empezó a sufrir la carestía de productos básicos que condujo posteriormente a una serie de amotinamientos en distintas localidades que se extendieron como la pólvora a través del Canal de Castilla”.
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