PALMA, 29 (EUROPA PRESS)
Otro de los comisarios que llevó a cabo la investigación de revelación de secretos que ha desembocado en el juicio contra los investigadores del caso Cursach ha afirmado que delatar al policía del Grupo de Blanqueo de Capitales Iván Bandera como autor de las filtraciones significaba “ponerse enfrente de Penalva y Subirán”.
Respondiendo a las preguntas del Ministerio Fiscal, el testigo ha empezado contando los hechos que le llevaron a sospechar del policía como filtrador. En primer lugar, ha resaltado que el subinspector Miguel Ángel Blanco –también acusado– excluyó de varias reuniones “sólo a Iván, porque sospechaba de él” por su relación con periodistas.
También, para justificar sus sospechas, el testigo se ha remontado a la investigación de la Madame, en la que coincidió con Iván por primera vez. “Allí hubo cosas muy turbias, pero no tuve pruebas en ese momento para decir que Iván tenía algo que ver con la farsa del reconocimiento que hace la testigo” de un jefe al que el policía acusado “odiaba profundamente”, ha dicho.
Por tanto, “si era capaz de haber tenido algo que ver con una declaración muy turbia, también podría haber filtrado a prensa”, ha interpretado el testigo, sumado a que vio “claramente que Blanco excluía a Iván”. Además, ha dicho entender que Blanco no quisiera delatar a Bandera. “Apuntar a Iván era ponerte enfrente de Penalva y Subirán”, ha sostenido.
Seguidamente, ha expuesto otra serie de indicios “contundentes” que motivaron la detención del policía acusado en esta causa. Una vez arrestado, ha continuado el investigador, “se le explicó en el despacho lo que había y puso el móvil encima de la mesa”, advertido de que se le iba a intervenir.
“Ahí se quedó el teléfono todo el tiempo. Después salimos del despacho para que se entrevistara con su abogado y luego entregó el teléfono voluntariamente, durante el acta de declaración”, ha puntualizado el policía, quien ha insistido en que la entrega se realizó en presencia letrada.
Preguntado por las acusaciones particulares, el testigo ha recordado al Tribunal que, revisando la documentación, encontró “12 actas” que hacían referencia a los detenidos y los distintos objetivos que tenían hacia ellos, marcados con las frases ‘que venda a…’. En esta línea, ha mencionado distintos ejemplos que, bajo su juicio, interpretó como presiones hacia los detenidos.
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