MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
El secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha agradecido a su homóloga sudafricana, Naledi Pandor, por sus esfuerzos para conseguir la paz en Ucrania tras la visita de la delegación de países africanos a Rusia y Ucrania.
“Blinken ha agradecido los esfuerzos de la delegación y ha enfatizado la fuerza del compromiso de Estados Unidos con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania y la visión de Ucrania de una paz sólida y duradera para poner fin a la guerra brutal y no provocada de Rusia”, ha declarado el portavoz de Blinken, Matthew Miller, en un comunicado.
A mediados de junio, una delegación de líderes africanos hicieron una visita a Ucrania y Rusia para intentar mediar en un conflicto en el que, a pesar de que estos países han adoptado diferentes posturas, la delegación optó por el “no alineamiento”.
La delegación estuvo integrada por el mandatario sudafricano, Cyril Ramaphosa, y por los presidentes de Senegal, Macky Sall; Zambia, Hakainde Hichilema; y Comoros, Azali Assoumani, quien es además el presidente de turno de la Unión Africana (UA); así como el primer ministro egipcio, Mustafá Madbuli, y un representante del Gobierno de Uganda, después de que el presidente, Yoweri Museveni, cancelase el viaje tras dar positivo en coronavirus.
Asimismo, República del Congo envió un representante después de que el presidente del país, Denis Sassou-Nguesso, afirmara que las condiciones no son las adecuadas “para un diálogo pacífico y constructivo” debido a que la contraofensiva ucraniana “plantea riesgos para la sostenibilidad del acuerdo de cereales, que es muy importante para África”.
La propuesta de paz africana es una más de las iniciativas que han surgido por parte de algunos actores internacionales por erigirse en mediadores de un conflicto que se prolonga ya desde hace más de quince meses. A esta se suma también la de China y Brasil, si bien desde Ucrania han insistido que solo valorarán aquellas que contemplen una serie de condiciones a las que no está dispuesto a renunciar.
Se trata, entre otras, a la vuelta a la fronteras reconocidas internacionalmente antes de 2014, lo que incluye también la península de Crimea, el fin del conflicto –no un congelamiento del mismo– y llevar ante la justicia a los responsables de crímenes de guerra.
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