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Las Cámaras de Comercio consideran que contar con un tutor externo en la formación profesional dual es crucial para facilitar la integración de las pequeñas y medianas empresas

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“Una cosa es que sea difícil, y otra es que sea imposible”, afirma Cueli

GIJÓN, 21 (EUROPA PRESS)

Un proyecto piloto de las Cámara de Comercio ha dado como resultado que la figura del tutor externo de FP dual será un elemento importante para la incorporación de pymes y micropymes a esta formación.

Así se ha puesto de manifiesto este miércoles durante la presentación de los resultados del mismo, en la Cámara de Comercio de Gijón, en un acto en el que ha participado el director de Servicios a Empresas de la citada institución cameral, Ignacio Martín, Ignacio de Benito, de la Fundación Bertlesmann, Sergio Martín, que ha actuado como tutor externo en este proyecto, José Manuel López Guerrero, del Centro Integrado de FP La Laboral, y el director de FP del Principado de Asturias, Javier Cueli.

Este último, si bien no ha visto mal esta figura de tutor externo, e incluso necesario en el caso de las empresas pequeñas, ha sido más escéptico en la forma en que se va a gestionar y ha recalcado que corresponde aspectos de la Ley de FP Dual aún por desarrollar.

Sobre ello, ha incidido en que no es lo mismo un tutor externo en el entorno del Parque Científico y Tecnológico de Gijón que en un lugar donde las empresas están mucho más dispersas.

También ha recalcado que estos tutores tienen que tener una formación específica, que posiblemente vayan a dar las propias Cámaras de Comercio, si bien aún no está regulado.

Además, ha llamado la atención sobre lo que supondría en operativa y coste si en Asturias, que hay 10.000 alumnos en FP, cada 15 aproximadamente haya que poner un tutor externo que solo se dedique a eso como sugiere este proyecto piloto.

Unido a ello, ha apuntado que no cree que sea problema del tamaño de las empresas. Según él, hay experiencias de FP Dual en empresas grandes con departamento de formación propio y no considera que fueran más positivas que otras en sociedades más pequeñas, con por decir algo siete trabajadores.

“Una cosa es que sea difícil, y otra es que sea imposible”, ha defendido Cueli, quien ha agregado que es difícil porque se lleva años haciendo lo mismo.

Para él, hay margen de crecimiento de participación de empresas en este modelo formativo, ya que de 50.000 que hay en la región, solo tienen firmado convenio con unas 3.000. Eso sí, ha afirmado que entre estas últimas hay de todo, incluso hay pymes y micropymes.

A su juicio, seguramente sea “muy difícil” los primeros tres, cuatro o cinco cursos, e incluso considera que saldrán nuevas normativas para ajustarlas, pero no convierte en imposible el llevar a la práctica este modelo de FP.

Incluso ha opinado que las pymes pueden apuntarse, incluso aunque no vayan a contratar al alumno en formación, porque depende de la responsabilidad social del tejido empresarial, también. De hecho, ha señalado que desde el punto de vista de empleo es menos probable que contraten al alumno en una empresa grande que en una pequeña, aunque ha reiterado que no cree que el factor principal para participar en este modelo sea la empleabilidad.

A esto ha sumado que los centros de formación van a tener que hacer un esfuerzo para adaptarse a la ley y las empresas también. “Es inevitable”, ha asegurado Cueli, antes de insistir en que “no tiene vuelta atrás, salvo que se cambie la ley”.

Por otro lado, ha indicado que antes de la pandemia de la COVID-19 había un seis por ciento de alumnos que cursaba FP Dual y ahora el porcentaje es más bajo “porque quieren beca obligatoria”, ha apuntado.

Preguntado por las quejas del sector empresarial por la falta de mano de obra especializada, ha sostenido que es “mucho más complejo” que decir que no hay formación adaptada los perfiles profesionales que se piden.

En cuanto al desarrollo del proyecto, el tutor externo, al contrario que Cueli, sí ha visto la empleabilidad como elemento principal para que pymes y micropymes quieran participar.

En el caso de este proyecto, él fue tutor externo de seis 6 empresas y otros tantos alumnos. Por su experiencia, ha opinado que cada tutor no debería de llevar más de cinco alumnos a la vez, o, en todo caso si la incorporación de estos es progresiva, 15 durante el curso.

Ha explicado, asimismo, que se trata de una figura a caballo entre el centro de formación y la empresa. También ha señalado que existe necesidad en las pymes y micropymes de contar con talento joven, pero existe de igual forma un “componente riesgo” de no querer meterse en estos programas por la implicación que suponen. Es en ese contexto donde vendría a facilitar la figura del tutor externo su incorporación.

Se trataría, eso sí, de un tutor que tenga conocimiento de la nueva ley FP Dual y del sector, y una alineación con el centro formativo. Además, debería de haber un calendario formado alumnos – empresas para que no haya malentendidos y hacer un preproyecto.

Ha recalcado, por otro lado, que para valorar si una pyme puede funcionar con este modelo de programa, no vale solo con la voluntad de apuntarse, ya que debe haber un compromiso a largo plazo, según él. También ha visto mayor complejidad para que funcione con la modalidad de teletrabajo, ya que genera muchos tiempos parados por el alumno. Para él, “no es nada recomendable”.

Con todo, lo ha tenido claro al afirmar que cree “completamente en el modelo de FP dual”. Para él, el poder estar dentro de una empresa es un aprendizaje “vital”.

Por otro lado, sí ha reconocido que adaptar esto a la nueva ley requiere de más tiempo y trabajo, pero también ha considerado que es una “necesidad”.

Por parte de la Cámara de Comercio gijonesa, Martín ha destacado que este proyecto, en el que se ha trabajado los últimos dos años, ha sido un “absoluto éxito”. También ha permitido comprobar que hay “líneas de mejora”.

Y si bien ha dicho ser consciente de que la nueva ley y el nuevo modelo parece “complejo”, ha considerado que en unos años será “el día a día”. Al margen de la importancia de la evaluación del aprendizaje, ha resalrado el compromiso de empresa y alumno, y la inserción laboral posterior.

En el caso de De Benito, este ha puesto énfasis en que el 96 o 97 por ciento del tejido industrial español son pymes, que no tienen capacidad para dedicarse a la tutorización del alumno. De ahí que haya visto importante la figura de tutor externo, cuya posibilidad ya contempla la ley, según él. Ha confiado, asimismo, en que la puesta en marcha de esta iniciativa sea “exitosa”.

Al tiempo, ha resaltado que el objetivo de la FP dual es la empleabilidad también. A este respecto, ha citado una encuesta a 500 alumnos de los que el 96,4 por ciento contestó que la FP Dual había mejorado su empleabilidad.

Eso sí, ha incidido en que solo un cuatro por ciento de los alumnos de FP está ahora estudiando el modelo Dual. Es por ello que ha advertido de que si se tiene que pasar a que sea todo sea FP Dual, el reto está en las pymes, en que se incorporen a este programa y que no tengan “miedo” a hacerlo.

López Guerrero, por su parte, ha ahondado en que antes llegaban fácilmente a empresas grandes, lo que permitía que los alumnos se insertaran laboralmente en ellas, pero no podían llegar así a las pymes.

Por este motivo, ha opinado que el tutor externo puede funcionar muy bien en ese aspecto, primero con la ayuda a pymes en todo el apartado documental y también el poder hacer una formación inicial con el alumnado y luego su seguimiento.

Del programa piloto, ha considerado que faltó tiempo para que la información calara más en empresas y alumnado y que quedara más claro el compromiso por ambos.

Pese a ello, ve importante mejorar y extender esta figura de tutor externo en la FP. Ha recordado, al tiempo, que hay de margen aún un año natural para incorporar a la normativa todo lo que se deba, incluido el desarrollo de esta figura.


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