Washington sostiene que “las atrocidades que ocurren hoy” recuerdan al genocidio de 2004 en Darfur
MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Estados Unidos ha condenado este jueves las violaciones de Derechos Humanos que están teniendo lugar en el marco de los enfrentamientos entre el Ejército de Sudán y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), especialmente la violencia que se está documentando en la región de Darfur Occidental.
“Estados Unidos condena en los términos más enérgicos las continuas violaciones y abusos de Derechos Humanos y la espantosa violencia en Sudán, especialmente los informes sobre violencia sexual generalizada y asesinatos por motivos étnicos en Darfur Occidental a manos de las RSF y milicias aliadas”, reza un comunicado del Departamento de Estado estadounidense.
El portavoz del Departamento, Matthew Miller, ha señalado que el Observatorio del Conflicto de Sudán y medios de comunicación han documentado con imágenes satelitales asentamientos arrasados por “fuerzas merodeadoras” en los estados de Darfur Occidental, Meridional y Septentrional. “Según voces sudanesas dignas de crédito, (esto) forma parte de un nuevo patrón de violencia étnica selectiva contra las poblaciones no árabes”, ha sostenido.
“Las atrocidades que ocurren hoy en Darfur Occidental y otras zonas son un ominoso recordatorio de los horribles sucesos que llevaron a Estados Unidos a determinar en 2004 que se había cometido genocidio en Darfur”, ha declarado el portavoz.
Asimismo, ha lamentado que “las mujeres se están llevando la peor parte de esta violencia”. “Las víctimas y los grupos de Derechos Humanos han acusado con credibilidad a soldados de las RSF y milicias aliadas de violaciones y otras formas de violencia sexual relacionada con el conflicto”.
Miller también ha aprovechado la ocasión para condenar “específicamente” la muerte del gobernador de Darfur Occidental, Jamis Abdalá Abkar, “después de que acusara a las RSF y a otras fuerzas de perpetrar un genocidio”. El Ejército sudanés acusó a las paramilitares del secuestro y la ejecución del líder de la región, mientras que estos se distanciaron de lo sucedido y lo achacaron a “bandidos” que asaltaron la residencia del fallecido.
Las autoridades estadounidenses han señalado que “aunque las atrocidades que están teniendo lugar en Darfur son atribuibles principalmente a las RSF y a las milicias afiliadas”, las Fuerzas Armadas Sudanesas no han protegido a la población civil “y, al parecer, han avivado el conflicto fomentando la movilización de las tribus”.
Washington, que ha pedido a ambas partes que pongan fin a los combates en la zona y hagan rendir cuentas a los responsables de la violencia, ha denunciado que el Ejército sudanés ha obstaculizado los esfuerzos humanitarios con ataques de aviones militares o drones.
Las actuales hostilidades entre el Ejército y las paramilitares estallaron en el marco de un aumento de las tensiones en torno a la integración de las RSF en el seno de las Fuerzas Armadas, parte clave de un acuerdo firmado en diciembre para formar un nuevo gobierno civil y reactivar la transición abierta tras el derrocamiento de al Bashir en 2019, dañada por el golpe de Estado de octubre de 2021, en el que fue derrocado el primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok.
- Te recomendamos -
