MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El director de comunicación y portavoz del Parlamento Europeo, Jaume Duch, espera que el Pacto de Migración y Asilo europeo se cierre antes de las elecciones europeas de junio de 2024 y no cree que el adelanto de los comicios generales en España al próximo 23 de julio, mientras el país ostenta la Presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea, vaya a suponer un obstáculo.
En una entrevista con Europa Press, Duch ha comentado que no es la primera vez que se celebran elecciones generales en un país durante el semestre en el que ocupa la Presidencia europea.
Según ha afirmado, la expectativa de la Eurocámara es que, en el caso de España, que presidirá la UE en el segundo semestre de 2023, las posibles consecuencias relacionadas con esa situación sean “las mínimas”.
“Lo importante es que se puedan mantener el calendario de reuniones previstas y los procesos de negociación entre el Parlamento y el Consejo para que se apruebe la mayor parte de la legislación que está pendiente y que sería bueno que se aprobase antes de que lleguen las próximas elecciones”, ha subrayado.
Una de las cuestiones pendientes es la reforma de la política migratoria común, que, según ha señalado Duch, es importante para la Presidencia española y también “es una de las prioridades más importantes del Parlamento Europeo”, que ya intentó que se aprobase un pacto legislativo antes de los comicios de 2019.
“En esta ocasión, el Parlamento y la Comisión han vuelto a hacer sus deberes a tiempo y esperemos que lo haga el Consejo. Sabemos que va a haber dificultades, pero, sinceramente, yo pienso que no van a venir precisamente de la Presidencia española; más bien van a venir de las posiciones a veces un tanto extremas de algunos gobiernos de la UE.Pero, insisto, es una prioridad y sería bueno que llegásemos a las elecciones europeas con este acuerdo ya cerrado”, ha manifestado.
VOLVER A LA FÓRMULA DE LOS ‘SPITZENKANDIDATEN’
De cara a los comicios europeos de 2024 y la elección del próximo presidente o presidenta de la Comisión Europea, Duch ha expresado su deseo de que se vuelva a aplicar la fórmula de los ‘spitzenkandidaten’, como se hizo en 2014.
Entonces, los dos principales grupos de la Eurocámara designaron un candidato principal para las elecciones que sería además su propuesta para presidir el Ejecutivo comunitario.
Ese sistema “funcionó perfectamente” y “sería bueno que volviéramos a la situación de 2014”, ha defendido, destacando que esa es la voluntad de la mayoría de los grupos parlamentarios.
“Es verdad algunos partidos creen que este sistema tendría mucho más sentido con listas transnacionales, pero eso no quiere decir que tengamos que esperar a que estas listas entren en vigor”, porque entonces “muy probablemente no habría ‘spitzenkandidaten’ ahora en el 2024”, ha añadido.
A su juicio, vincular la elección del presidente de la Comisión al resultado de las urnas y permitir que los europeos vayan a votar sabiendo quién es el candidato de cada grupo es algo que “da transparencia y mucha más cercanía a las elecciones” y “refuerza la legitimidad de la propia Presidencia de la Comisión Europea”.
REACCIÓN DEL PARLAMENTO ANTE EL ‘QATARGATE’
Por otro lado, el portavoz del Parlamento Europeo ha elogiado la forma en la que la presidenta de esta institución, Roberta Metsola, actuó ante el ‘Qatargate’, la trama de corrupción de Qatar y Marruecos en la que se pagaron sobornos a eurodiputados con el fin de ganar influencia en Bruselas.
Duch considera que Metsola “reaccionó con muchísima rapidez y de una manera muy contundente” al poner en marcha un proceso de reforma.
Según ha precisado, ya han entrado en vigor prácticamente la mitad de las catorce medidas que propuso la presidenta y “sigue habiendo una voluntad bastante clara de avanzar” en las restantes medidas que conciernen al sistema de trabajo interno de la Eurocámara.
Sobre el papel de Marruecos, ha dicho que tiene “muchísimos intereses” en la Unión Europea, desde la política agrícola y pesquera hasta la comercial, pasando por la energía o la cuestión territorial del Sáhara Occidental, y, por tanto, es “evidente” que va a intentar influir en estos temas.
Sin embargo, “hay líneas rojas que no se pueden traspasar, y en este momento una de las cuestiones que se están dilucidando es si eso sucedió o no”, ha afirmado, recordando que, mientras tanto, se están aplicando medidas de precaución como, por ejemplo, prohibir la entrada al Parlamento Europeo de lobistas o representantes de intereses de Marruecos “hasta que todas estas cosas se hayan aclarado suficientemente”.
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