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No es posible reescribir el texto tal como está, porque dice que los precios subieron en abril de 2022, que aún no ha ocurrido. Por favor, proporcione la información correcta

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VALLADOLID, 25 (EUROPA PRESS)

Los precios industriales aumentaron un 0,7 por ciento en abril en relación al mismo mes de 2022 en Castilla y León, frente a un 4,5 por ciento en negativo en España que anota en este caso una tasa más de tres puntos inferior a la registrada en marzo, según ha informado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La tasa anual del IPRI ha cayó en abril en catorce comunidades autónomas, entre ellas Castilla y León que pasa de un 3,0 por ciento al 0,7 por ciento por lo que 2,3 baja puntos. Los mayores descensos se han producido en País Vasco, Cataluña y Región de Murcia, con bajadas de 4,8, 4,4 y 3,8 puntos, respectivamente, mientras que los incrementos se han anotado en Canarias, Islas Baleares y Principado de Asturias, cuyas tasas suben 2,8, 1,4 y 0,6 puntos, respectivamente.

El mayor descenso de los precios industriales en comparación con el mes anterior se registró en la partida de energía, con un -7,5 por ciento, seguida de los bienes intermedios (-1,1 por ciento), y subieron en los bienes de equipo (1,9 por ciento) y en los bienes de consumo (1,0 por ciento).

Y en comparación con abril de 2022 el único descenso de los precios industriales se anota en la partida de energía, con un -22,3 por ciento, mientras que suben en el resto: bienes de consumo (16,4 por ciento), bienes de equipo (6,1 por ciento) y bienes intermedios (0,6 por ciento).

A nivel nacional, con el descenso interanual de abril, la inflación del sector industrial encadena dos meses de tasas negativas después de que en marzo pusiera fin a un periodo de 26 meses consecutivos de incrementos, en el que llegó a registrar tasas de dos dígitos durante más de 20 meses.

El descenso de los precios industriales registrado en abril se debe a la caída experimentada por la energía, que recortó casi cuatro puntos su tasa, hasta el -20,5 por ciento, por el abaratamiento de la producción de gas y del refino de petróleo; así como a los retrocesos registrados en bienes intermedios y bienes de consumo no duradero.


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