MADRID, 23 (SERVIMEDIA)
La depresión aislada en niveles altos (DANA, en la jerga meteorológica) que golpea actualmente zonas del este peninsular -especialmente en el sureste- ha llevado lluvias nunca registradas en mayo en Almería desde al menos 1968 y chubascos de intensidad torrencial en la localidad murciana de Cartagena.
A diferencia de las temperaturas máximas o mínimas, que se consideran en un día natural, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) contabiliza datos de precipitaciones entre las 9.00 horas de una jornada y las 9.00 de la siguiente (horario de verano), periodo que se denomina día pluviométrico. Ello es así por mantener la serie histórica de cuando los meteorólogos consideraban esa hora para observar la cantidad de lluvia recogida.
Entonces, el aeropuerto de Almería recogió 52,6 litros por metro cuadrado en el día pluviométrico de este 22 de mayo (entre las 9.00 horas de ayer a 9.00 de hoy), lo que supone el récord de jornada más lluviosa de mayo en ese lugar desde que la serie histórica comenzara en 1968. La anterior efeméride eran los 41,7 litros por metro cuadrado contabilizados el 4 de mayo de 1993.
Además, en el día pluviométrico del 22 de mayo cayeron 130 litros por metro cuadrado en Ontinyent (Alicante), 113 en Cartagena (Murcia) y 108 en Albox (Almería), según Rubén del Campo, portavoz de la Aemet.
Más concretamente, esta madrugada hubo un chaparrón que acumuló 61 litros por metro cuadrado en el casco urbano de Cartagena. “Se puede hablar de lluvia torrencial, término que se aplica cuando caen más de 60 litros por metro cuadrado en una hora o más de 10 litros por metro cuadrado en tan solo 10 minutos”, explicó Del Campo en declaraciones facilitadas a los medios y recogidas por Servimedia.
Intensidades torrenciales de más de 10 litros por metro cuadrado en 10 minutos también se han registrado en otras localidades del sureste peninsular durante las últimas horas. Y municipios de Alicante, Almería, Murcia y Valencia han recogido más de 80 litros por metro cuadrado desde que la DANA comenzara a azotar esas zonas desde este lunes. “Son precipitaciones muy abundantes y que superan con creces el valor normal del mes de mayo completo”, apuntó Del Campo.
¿HASTA CUÁNDO?
Esas precipitaciones intensas volverán esta tarde en Alicante y el sur de Valencia, que se encuentran en aviso naranja por riesgo importante para hacer actividades al aire libre ante la previsión de lluvias torrenciales al menos 60 litros por metro cuadrado en una hora o de 150 litros en 12 horas.
“Atención también a los chubascos muy fuertes en Aragón, sobre todo en la ribera del Ebro de Zaragoza, donde también hay aviso naranja, y podría seguir habiendo chubascos fuertes o localmente muy fuertes durante este martes y en la jornada del miércoles en Murcia, Andalucía oriental y, sobre todo, en el nordeste”, indicó Del Campo.
Por lo tanto, buena parte de la mitad oriental de la península y Baleares están este martes y este miércoles en riesgo de que caigan chubascos fuertes o localmente muy fuertes, que podrán estar acompañados de tormenta y de granizo.
A partir del jueves lloverá sobre todo en el tercio oriental de la península y en Baleares, y desde el viernes y con vistas al fin de semana las lluvias podrían generalizarse a amplias zonas de la península.
SEQUÍA
Por otro lado, un episodio de este tipo plantea la pregunta de hasta qué punto esas precipitaciones son beneficiosas para paliar la sequía. “Cuando caen lluvias de intensidad torrencial, desde luego, muchas veces se provocan daños tiene impactos y también el granizo”, indicó Del Campo.
No obstante, desde el pasado 1 de marzo hasta este domingo 21 de mayo se recogieron en el conjunto de España un total de 48 litros por metro cuadrado. “De momento, seguimos ante la primavera más seca de la serie histórica, que arranca 1961, y estamos lejos de alcanzar la primavera de 1995, en la que cayeron 86 litros por metro cuadrado. No obstante, con las precipitaciones que se esperan de aquí a finales de mes, podríamos superar en precipitaciones a esa primavera de 1995 y que no se tratase de la más seca”, comentó Del Campo.
El portavoz de la Aemet añadió al respecto: “Habrá que esperar a que termine mayo para hacer el recuento definitivo, pero lo que sí está claro es que se tratará, en cualquier caso, de una primavera muy seca, pues el promedio para la estación normal es de 180 litros por metro cuadrado”.
En cuanto a la sequía, las lluvias de estos días ayudan a frenar su avance y en algunas zonas se reducirá el déficit de precipitaciones, especialmente en el sureste peninsular y otras áreas de la vertiente mediterránea, donde la sequía no es de tan larga duración como la que vive la vertiente atlántica, por ejemplo, en el Guadalquivir o en otras zonas como el Guadiana.
Sin embargo, el año hidrológico en el conjunto de España refleja que desde el pasado 1 de octubre hasta este 21 de mayo cayeron 360 litros por metro cuadrado de precipitación, cuando lo normal son 504. Por tanto, en estos casi ocho primeros meses de año hidrológico ha llovido un 28% menos de lo habitual.
La media de un año hidrológico completo (del 1 de octubre de un año al 30 de septiembre del siguiente) es de 640 litros por metro cuadrado en España, por lo que alcanzar esa cifra supondría que debería llover 280 litros por metro cuadrado en lo que queda de mayo y hasta septiembre, pero lo normal en esos algo más de cuatro meses es que caigan 135 litros.
“Tendría que llover más del doble de lo normal para en estos cuatro meses y pico, entre el verano, septiembre y lo que queda de mayo, para acabar el año hidrológico en su valor normal, algo muy poco probable, ya que hasta la fecha no ha sucedido nunca desde que hay registros. No ha caído nunca esa cantidad tan abundante de precipitación entre la última semana de mayo, los meses de verano y septiembre”, concluyó Del Campo.
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