MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Un tribunal de Pakistán ha ordenado este jueves la liberación de un alto cargo del partido opositor Pakistan Tehrik-e-Insaf (PTI) al determinar que su arresto la semana pasada tras la detención del ex primer ministro Imran Jan fue “ilegal”, apenas días después de la excarcelación del propio Jan.
Así, el Tribunal Supremo de Islamabad ha ordenado que Shah Mahmud Qureshi, vicepresidente del PTI, sea puesto en libertad, según ha recogido la cadena de televisión paquistaní Geo TV. Qureshi fue uno de los altos cargos detenidos en Islamabad tras el estallido de protestas violentas después de que Jan fuera puesto bajo custodia.
Antes de su arresto, Qureshi, quien fue ministro de Exteriores entre 2018 y 2022 durante el gobierno de Jan, pidió a los seguidores del partido opositor que mantuvieran la lucha para lograr “la verdadera libertad”. Desde entonces, ha sostenido que no se arrepiente de sus declaraciones y ha negado que incitara a la violencia.
El tribunal ha ordenado además la liberación de la esposa de Shehriar Afridi, otro alto cargo del PTI, también detenida la semana pasada. Afridi y su mujer fueron detenidos por sospechas sobre su presunta participación en un ataque contra la Sede General del Ejército en la ciudad de Rawalpindi.
El Comité de Seguridad Nacional de Pakistán (CSN) prometió “tolerancia cero” con los responsables de los disturbios tras la detención de Jan, posteriormente liberado después de que el Tribunal Supremo decretara que su arresto había sido “ilegal”, incluida la apertura de juicios en tribunales militares por los ataques contra instalaciones del Ejército.
La coalición gubernamental pidió el martes la dimisión del presidente del Tribunal Supremo, Umar Ata Bandial, por la decisión de liberar bajo fianza a Jan, detenido en el marco de un caso por presunta corrupción. Así, acusó a Bandial de “dar facilidades indebidas” al líder del TPI.
Jan fue cesado en octubre de 2022 a través de una moción de censura en el Parlamento, aprobada después de que el Tribunal Supremo revocara la decisión del entonces primer ministro de disolver el Parlamento y anunciar elecciones anticipadas tras la negativa de la Presidencia del órgano legislativo a celebrar la votación en primera instancia. En noviembre, resultó herido de bala tras ser tiroteado durante una protesta contra el nuevo Gobierno.
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