MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
El banco privado suizo Mirabaud cree que pensar que la inteligencia artificial (IA) “provocará una ola global y sin precedentes de despidos es un gran error”, y añade, sin embargo, que esta tecnología sí que supondrá un “cambio importante” en el “poder” de muchos sectores.
El análisis, elaborado por el especialista en inversión de Mirabaud John Plassard, se desliga así de las previsiones de la entidad financiera Goldman Sachs, que vaticina que la IA supondrá la pérdida de unos 300 millones de puestos de trabajo en todo el mundo y que hasta dos tercios de las profesiones podrían ser parcialmente automatizadas.
Así, el banco helvético limita el impacto de la implantación de esta tecnología a una pérdida neta de unos 14 millones de empleos a nivel global.
Por otro lado, el informe de Mirabaud se hace eco del análisis presentado el pasado marzo por la empresa estadounidense OpenAI, propietaria del servicio ChatGPT, en el que se detallan los tipos de trabajo que corren un mayor riesgo de desaparecer debido a la inteligencia artificial.
Así, destaca que entre los empleos susceptibles de ser eliminados por la IA –debido a que esta puede reducir a la mitad el tiempo para realizar sus tareas asociadas– se encuentran, en general, los trabajos que “requieren tareas repetitivas, cierto nivel de análisis de datos y toma de decisiones de rutina”, que presentan “el mayor riesgo de exposición”.
Esa lista está encabezada por los contables, administradores y asistentes legales, analistas de cambio climático, periodistas, matemáticos, asesores fiscales, analistas financieros, escritores y diseñadores web.
“En el otro extremo del espectro, y naturalmente, las industrias físicas como la manufactura, la minería y la agricultura han estado mejor protegidas, pero aún tienen funciones de procesamiento de información que están en riesgo”, señala el analista de Mirabaud.
Por otro lado, la entidad suiza también ha recuperado para su análisis el estudio del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) en el que se recoge que alrededor del 85% de las organizaciones consideran que una mayor adopción de nuevas tecnologías y la expansión del acceso digital son las “tendencias con más probabilidades de impulsar su transformación”.
De este modo, la implementación de nuevas tecnologías generará crecimiento laboral para más de la mitad de las entidades encuestadas por WEF, al tiempo que considera que “los tres principales impulsores de la destrucción neta de puestos de trabajo prevista son un crecimiento económico más lento, la escasez de suministros y el aumento de los costes, y el aumento del coste de vida de los consumidores”.
“Pensar que la inteligencia artificial provocará una ola global y sin precedentes de despidos es un gran error. Sin embargo, vamos a ver un cambio importante en el poder y cambios estratégicos en muchos sectores debido a la inteligencia artificial. Es una cuestión de adaptación más que de destrucción”, concluye en este contexto el analista de Mirabaud.
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