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Los expertos sugieren una mayor vigilancia epidemiológica ante los casos de dengue en España, ya que estos presentan síntomas leves en muchos casos

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MADRID, 26 (EUROPA PRESS)

Los expertos afirman que la mayoría de casos de dengue que se registran en España no son graves y los pacientes suelen presentar “muy poca sintomatología”, por ello piden una “vigilancia epidemiológica” para evitar la transmisión vírica.

Se trata de una enfermedad principalmente importada en España y de declaración obligatoria. Durante el verano pasado los hospitales españoles detectaron un incremento de casos de dengue en turistas procedentes de Cuba, de ahí que los especialistas reclamen que se intente detectar los casos en España lo antes posible.

“Los médicos no tienen acceso al diagnóstico, ese es el gran reto del Plan Nacional, frenar o detectar en el minuto cero lo que pasa. El reto es identificar a las personas que han viajado a los países con dengue. Además, hay que las medidas preventivas para evitar que lo traigan a España”, ha informado el presidente de la Fundación IO, médico de familia y microbiólogo clínico, Manuel Linares.

En España los primeros casos de dengue autóctono se identificaron en 2018, un brote de cinco casos relacionados en Murcia y otra caso aislado en Cataluña, que no estaba relacionado con el brote anterior. Desde 2016 a 2021 la evolución de notificaciones ha sido variable en España, con un promedio de 204 casos anuales, con el máximo en 2019, y con mayor número de casos en periodos estivales, de junio a septiembre.

El periodo de incubación de la enfermedad es de tres a 14 días después de la picadura del mosquito infectado. Los síntomas de los casos de dengue suelen ser náuseas, vómitos, sarpullidos o molestias, algo que se puede confundir con otras enfermedades. “Por sintomatología no se puede detectar el dengue, es muy difícil, se puede confundir con zika”, ha añadido el especialista.

Se estima que los casos de dengue en todo el mundo afectan a 390 millones de personas anualmente, de los que 500.000 necesitan hospitalizaciones. Hay más de cien países endémicos, principalmente en Asia y en Latinoamérica, sobre todo en regiones tropicales y subtropicales.

Los expertos advierten que el número de casos notificados a la Organización Mundial de la Salud (OMS), se han multiplicado por ocho en las últimas dos décadas, pasando de los 505.430 casos en el año 2000 a los más de 2,4 millones en 2010 y 5,2 millones en 2019.

“El 50 por ciento de personas vive en zonas de riesgo de padecer esta enfermedad, cada 25 minutos se produce una muerte de dengue en el mundo”, ha señalado Linares.

TRANSMISIÓN DEL DENGUE

El principal mecanismo de transmisión del dengue se da a través de la picadura de los mosquitos ‘Aedes aegypti’ y ‘Aedes alboitu’, conocido como el mosquito tigre y que viven cerca de 30 días. “Se trata de mosquitos periurbanos, por eso afectan en zonas urbanas, es diferente a la malaria, que afecta en zona rural. Este tipo de mosquitos viven cerca de los humanos”, ha informado Linares.

En este sentido, el experto ha informado que este tipo de mosquitos se están expandiendo por más zonas debido al cambio climático, la escasez de saneamiento, o la falta de fumigación. “La transmisión ocurre por debajo de los dos mil metros, aunque cada vez se detecta más mosquito vector en otras zonas. Siempre se asocia a estaciones de lluvias y es interrumpida por el clima frío. El mosquito queda infectado toda la vida y puede transmitir a la descendencia”, ha informado Linares.

El presidente de la Fundación IOS ha destacado el control vectorial como una de las mejores herramientas para evitar la expansión del dengue, con usos como las mosquiteras. Además, ha advertido que una de las grandes prevenciones es ‘descacharrización’. “Hay que evitar dejar cacharros o bidones con agua para que los mosquitos no procreen”.

Asimismo, con la actual sequía en España, Linares ha señalado que la falta de agua “se acumulan bidones y eso puede beneficiar al mosquito. Hay que recordar que el mosquito vector no se va a ir, se reproduce en sitios de agua que muchas veces son botellas con algo de agua. Con la sequía se pueden acumular estos recipientes y favorecerles”, ha explicado.

Pero además, de la transmisión a través de la picadura de mosquito, existen otros casos menos frecuentes como la transfusión, trasplantes, contacto de mucosas, lactancia y transmisión sexual, como ocurrió en un caso en registrado en Madrid en el año 2019.

Para Linares, el papel de paciente asintomático por dengue va a ser “clave en los próximos años”. “Los pacientes que no tenían síntomas eran responsables de mas del 70 por ciento de los casos en Manaos (Brasil)”, ha puesto como ejemplo, y ha advertido que este tipo de personas pasan “desapercibidas” y son portadoras.

TRATAMIENTO

Los especialistas coinciden en que no existen un antiviral para tratar la enfermedad. “La única herramienta que tenemos es la prevención contra el dengue, de momento no hay antivirales, se pueden hacer tratamientos de control y de soporte”, ha indicado el experto en epidemias y profesor de la Universidad de Harvard, Elvis García.

“La vacunación es la mejor herramienta para ir a una zona endémica y tener una seguridad de esquivar lo máximo posible la enfermedad”, ha afirmado García, al tiempo que ha añadido que “las herramientas están ahí pero no todos los países tienen el interés o la capacidad para emplearlas”.

Al hilo, Gustavo Díez, responsable de vacunas en Takeda, ha informado sobre los beneficios de la vacuna de la compañía, que la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) aprobó hace unos meses para su uso tanto en Europa como en el resto del mundo para prevenir la enfermedad causada por los serotipos 1, 2, 3 y 4 del virus en personas a partir de los cuatro años de edad.

“Es una vacuna que estaría indicada en viajeros porque tiene la indicación completa tanto en seronegativos como en seropositivos”, ha finalizado.


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