MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha lamentado la falta de propuestas por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para paliar los efectos de la sequía, que ya ha provocado pérdidas de producción cercanas a los 4.000 millones de euros respecto a la media de los últimos cinco años.
En este sentido, tras la reunión que ha tenido lugar este jueves entre la organización y el departamento de Luis Planas, Unión de Uniones ha pedido al Gobierno y a las comunidades autónomas la puesta en marcha de un “paquete de ayudas de estado, con recursos de todas las administraciones implicadas”, con el fin de apoyar al sector.
Unión de Uniones ha acudido al encuentro con el Ministerio de Agricultura para “pedir soluciones, pero con los deberes hechos”, a la par que ha tachado de “fiasco” la mesa de la sequía celebrada este miércoles, ya que “nadie planteó propuestas concretas”.
EL VALOR DE LA PRODUCCIÓN DEL CEREAL CAE
Según la organización agraria, los cultivos que han salido “peor parados” por la falta de lluvia, según la valoración de la organización, son los cereales, con una caída del valor de su producción de 2.350 millones de euros por debajo de la media de los últimos 5 años, lo que equivale a unas pérdidas del 47%.
En esta línea, el otro sector agrícola “más perjudicado” ha sido los forrajes, con cerca del 37% de recorte de la producción y 710 millones de euros menos, mientras que en hortalizas y patatas ya se han estimado pérdidas de 640 millones de euros, una caída del 6% respecto en comparación con el promedio de los 5 años pasados.
Adicionalmente, la sequía está afectando de forma “desigual” a los frutales, pese a que estas plantaciones “suelen ser prioritarias en riegos de socorro aún en épocas de restricción”, ya se están estimando pérdidas de 240 millones de euros, un 2,5 % del valor de la producción media.
Por su parte, sin ponderar lo que pueda aún pasar en el olivar y viñedo, la organización ha considera que se estaría hablando de una reducción de la producción de casi 4.000 millones de euros “que, concentrada sobre todo en algunos cultivos, es una ruina para esas explotaciones”.
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