MADRID, 14 (SERVIMEDIA)
El vicepresidente de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, asumió este viernes que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, permitirá el referéndum en Cataluña que pide ERC si sigue en La Moncloa tras las elecciones generales que tendrán lugar a final de año y denunció que “es el que está dirigiendo este proceso y es el jefe de la banda”.
Así lo indicó Buxadé en una entrevista en Servimedia, tras ser preguntado por el plan del presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, para tratar de sumar una mayoría a favor de un referéndum de autodeterminación que pudiera ser pactado y que el Gobierno rechazó el día siguiente de su presentación.
Buxadé avisó de que los independentistas harán el referéndum “si no se les para” y auguró que se llevará a cabo “cuando vean las condiciones”. En este sentido, dijo que Sánchez “es capaz” de “vender la patria” y “venderlo todo por mantenerse en el poder”, pero garantizó que si está Vox en el Gobierno “no lo van a hacer”. “Más aún, dejarán de intentarlo”, añadió.
Sobre este aspecto, Buxadé incidió en que es Sánchez el que está “dirigiendo todas estas operaciones”, reiteró que él “aprobó unos indultos ilegales e injustos” para los líderes del ‘procés’, y aseguró también que el presidente del Ejecutivo, al ministro que aprobó esos indultos, el exministro de Justicia Juan Carlos Campo, le nombró magistrado del Tribunal Constitucional.
También indicó que Sánchez fue quien cambió el delito de malversación de caudales públicos y propuso y aprobó la derogación del delito de sedición para los que habían “dado un golpe de Estado no puedan ser juzgados o vean eliminadas sus penas” para que, por ejemplo, el expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont no pueda ser juzgado por ese delito.
Además, señaló que Sánchez creó la “mesa de la traición”, que Vox bautizó como “mesa de la conspiración” porque “hay una conspiración nuevamente para delinquir”. En este sentido, subrayó que ya en 2016, justo antes “del golpe”, Vox ya denunció “esa conspiración” y en aquel momento estaba Soraya Sáenz de Santamaría “al mando de la nave del Estado”.
Al respecto, apuntó que si no es “gracias” al Rey de España, a unos jueces y unos fiscales del Tribunal Supremo “valientes” y a los catalanes que salieron a la calle el 3 de octubre en una manifestación “ondeando banderas de España por toda la ciudad”, hubiera habido un “golpe de Estado violenteo, una auténtica guerra civil en Cataluña”.
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