Inicio España Nixon y Mao se reencuentran en el Teatro Real con la ópera...

Nixon y Mao se reencuentran en el Teatro Real con la ópera ‘Nixon en China’

0

MADRID, 12 (EUROPA PRESS)

El Teatro Real estrenará el próximo 17 de abril la ópera ‘Nixon en China’ de John Adams, una recreación imaginada de la histórica visita del por entonces presidente estadounidense Richard Nixon en 1972 a la República Popular China liderada por Mao Zedong, que supuso una vía de acercamiento entre Occidente y Oriente.

El compositor estadounidense John Adams, uno de los principales representantes del minimalismo, compuso esta obra en el año 1987 y, desde entonces, se ha convertido en una de las óperas contemporáneas más llevadas a escena. “Se trata de la recreación de la historia, más que de los destinos de las personas: los personajes son construcciones mediáticas y no personas reales”, ha señalado el director artístico del Teatro Real, Joan Matabosch.

“Los personajes como Mao o Nixon aparecen sin el bagaje posterior (como puede ser el caso ‘Watergate’ que terminó por acabar con la carrera de Nixon), pero Adams muestra a sujetos en un contexto en el que están tratando de ser héroes o, al menos, en dejar un legado para la posteridad”, ha remarcado el escenógrafo Dick Bird.

‘Nixon en China’ cuenta con una dirección musical compartida entre la surcoreana Olivia Lee-Gundermann y Kornilios Michailidis –estaba prevista la dirección de Ivor Bolton, aunque finalmente no podrá por cuestiones de salud–. Cuatro saxos, dos pianos o un sintetizador electrónico serán algunos de los instrumentos dispuestos para mostrar las diversas influencias de Adams a la hora de componer esta pieza.

Desde el jazz hasta la música barroca, pasando por Stravinski, Wagner o Strauss pesan en un compositor que llegó a decir que en su casa no se distinguía al clarinetista Benny Goodman de Mozart. Los personajes de ‘Nixon en China’ también cuentan con un toque excéntrico, como las secretarias de Mao Zedong, la cuales repiten todo lo que dice su líder en un tono más bajo.

“La obra es colosal y esconde mucho sentido del humor, que es algo que ha defendido siempre Adams. De hecho, con las secretarias, hay momentos en que a Mao se le va la olla y se sale del discurso que se espera y son ellas las que se anticipan a lo que va a decir, para encauzar la situación. Es muy sutil”, ha apuntado Matabosch.

NI SUPERMÁN NI BATMAN

Lógicamente, se trata de una obra escrita por un occidental con el punto de vista de occidente. La directora musical Olivia Lee-Gundermann ha explicado cómo se perciben los hechos de diferente manera entre una cultura y otra. “Soy asiática y la principal diferencia de mentalidad es que allí no hay películas de superhéroes, no hay un Supermán o un Batman”, ha destacado.

“Digamos que hay un sentido mayor de comunidad –no se dice ‘mi marido’ o ‘mi padre’, por ejemplo.– y eso se nota también en la manera de observar esta obra. Aquí cada cantante puede ser un héroe, pero la orquesta tiene que ir al unísono: si falla uno, todo se rompe”, ha matizado.

En esta ópera se produce un “trasfondo sonoro” que da ejemplo también de esa coralidad, más allá de los personajes principales –como el de Mao, que “grita por encima” de ellos–. “Los personajes cantan muchas veces a la vez, pero textos distintos, así que será el espectador el que tenga que elegir lo que escuchar: al coro también se le escucha susurrar al oído mientras canta Nixon”, ha indicado Michailidis.

De telón de fondo, un archivo gigante que ha sido también la fuente de inspiración para recuperar este momento histórico. “Pensamos que lo que había ocurrido estaba en cajas polvorientas y debía ser el público el que quitase ese polvo para sacar su propia impresión de los hechos”, ha concluido Bird.


- Te recomendamos -