La Comunidad defiende el interés público de las ocupaciones autorizadas y recuerda que la protección se basa en la conexión y la vertebración
MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
Ecologistas en Acción ha solicitado una moratoria en las autorizaciones de ocupación de vías pecuarias en la Comunidad de Madrid después de que en 2022 se solicitaran 123 ocupaciones, un 136% más que en 2015, año en que la organización inició su seguimiento.
Así consta en el octavo informe de Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid sobre la situación de la ocupación en la Red de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid, unos caminos históricos de titularidad pública clasificadas como suelo protegido pero en el que, según lamenta la organización, las ocupaciones temporales “se han convertido en un subterfugio para permitir su transformación”.
Por ello, Ecologistas en Acción ha pedido una moratoria a las ocupaciones temporales a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, cuya gestión en la materia ha calificado de “nefasta”.
La organización ecologista ha recordado que las ocupaciones temporales consisten en autorizar por un periodo de tiempo determinado y no superior a diez años una construcción, una infraestructura o el desarrollo de una actividad, autorización que “sólo debe concederse de forma excepcional por cuestiones de interés público y cuando no haya otra solución”.
El problema, a su juicio, es que la Dirección General de Agricultura, Ganadería y Alimentación de la Consejería de Medio Ambiente “lleva años permitiendo estas ocupaciones de manera habitual para usos permanentes, no temporales”, de forma que cada año “se suma más superficie ocupada y transformada” a la Red de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid.
CONSTRUCCIÓN DE INFRAESTRUCTURAS MUNICIPALES
Así, han criticado que en las vías pecuarias madrileñas se autorice “la construcción de infraestructuras municipales como zonas deportivas, ambulatorios o parques y jardines”.
“Se permite la construcción de tramos de carreteras, vías férreas, tendidos eléctricos, embalses como el de Valmayor sobre la Cañada Real Segoviana. Incluso se ha autorizado la ocupación de terrazas de uso hostelero privado al aire libre en San Sebastián de los Reyes”, apunta la organización, que alerta de que también el subsuelo de las vías pecuarias “se ocupa con conducciones de gas, canalizaciones de aguas residuales, de abastecimiento de agua o fibra óptica”.
De esta forma, las vías pecuarias madrileñas acumulan cada año, alerta Ecologistas en Acción, “más superficie transformada” y “en muchos casos inutilizada para sus usos propios como son el ganadero o el recreativo”.
Respecto a estas críticas de Ecologistas, fuentes de la Consejería consultadas por Europa Press han señalado que los ejemplos que esta organización pone como “invasiones de las vías pecuarias” son en realidad “un claro ejemplo del interés publico”, tales como carreteras, pantanos o conducciones de gas, al tiempo que ha recordado que se trata de un bien protegido y que la legislación “permite su permuta por otras localizaciones”.
Por lo tanto, la Administración regional ha recalcado que la protección se basa “en la conexión y la vertebración” que hace del espacio natural.
En estos momentos, añaden desde la Consejería de Medio Ambiente, la Comunidad de Madrid está clasificando los más de 4.000 kilómetros de vías pecuarias que recorren la región y que ocupan más de 13.000 hectáreas de superficie, a fin de “protegerlas y que cumplan una función clave en el transporte ganadero, la conexión agrícola, el patrimonio natural o la conectividad de la biodiversidad”.
ANÁLISIS DE ECOLOGISTAS
Desde 2015, Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid realiza un informe anual en el que se analizan las repercusiones de las solicitudes de ocupación temporal. Los datos los obtiene, explican, de las publicaciones en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid y en el Portal de Transparencia por parte de la Dirección General de Agricultura y Ganadería de la Comunidad de Madrid.
Según sus datos, con anterioridad a 2015 el número de ocupaciones temporales era de 2.500, tras lo que entre 2015 y 2022 se produjo un aumento de un 136,5%. Hasta la fecha, la cifra llega a 2.980 ocupaciones temporales, añade la organización.
En cuanto a la tipología de las mismas, en 2022, 72 de las solicitudes (56,91%) se han cursado en ámbitos donde la vía pecuaria ha sido transformada, en todo o en parte, en calles, aceras y viales de urbanizaciones y polígonos industriales.
Por ello, las nuevas ocupaciones vendrán a profundizar en la alteración del vuelo o subsuelo de las mismas y producir una artificialización mayor de éstas. Mientras, el 43,08% restante se ha solicitado en vías pecuarias que discurren por el medio periurbano, rural y natural, lo que supone alterar, advierten, “vías pecuarias que hasta ahora se conservaban con cierto grado de naturalidad”.
En 2022, de las 123 solicitudes de ocupación temporal, 46 de ellas (el 37,39%) afectaban a alguna o varias figuras de espacios naturales protegidos en sentido amplio, como Red Natura 2000, Parques Regionales, Hábitats de Interés Comunitario, Montes de Utilidad Pública, ámbito de los Planes de Ordenación de Embalses y Reservas de la Biosfera.
De los 179 municipios de la Comunidad de Madrid, 170 poseen vías pecuarias y, de ellos, en 2022 fueron afectados por solicitudes de ocupación temporal de vías pecuarias 60 (el 35,29 %). De aquellos 60, un total de 27, el 45%, han sido los más afectados por solicitudes de ocupación, ya que han sufrido más de una.
Así, Guadarrama acumula once solicitudes, Galapagar ocho, San Agustín de Guadalix seis, Chapinería cinco y Getafe, Los Molinos y Alpedrete cuatro cada uno.
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