Otros han quedado en libertad o siguen en el hospital ingresados
PALMA, 6 (EUROPA PRESS)
Dos de los siete detenidos involucrados en una pelea con cuchillos tras un asalto a una plantación de marihuana en una finca ubicada en Sant Joan han pasado este jueves a disposición judicial.
Según han informado fuentes cercanas a los hechos, algunos han quedado además en libertad y otros siguen en el hospital ingresados, aunque todavía no se ha podido confirmar la cifra exacta.
Cabe recordar que los hechos ocurrieron el pasado martes de madrugada, cuando desde el hospital Son Llàtzer se recibió una llamada que informaba de cuatro personas con lesiones producidas por arma blanca. Posteriormente, se recibió otra llamada del Hospital Son Espases que alertaba del ingreso de dos personas más, también con diversas heridas.
Varias patrullas de Seguridad Ciudadana se desplazaron a ambos centros hospitalarios y averiguaron que todos los heridos estaban relacionados con una pelea. Las versiones sobre la misma eran distintas, siendo una que se había causado a raíz del casamiento de una menor y, la otra, por un desacuerdo en una pelea de gallos.
Además, también se indicó que la pelea había sido en un descampado en Son Ferriol. Con todo, los agentes comprobaron que los heridos en el hospital, algunos de ellos con varias heridas y en estado grave, formaban parte de dos grupos diferentes, cuatro por un lado y dos por el otro, por lo que procedieron a la detención de estas seis personas, pasando las diligencias al grupo de Homicidios de la Policía Nacional.
Este último se encargó de detener a una séptima persona, relacionada con el grupo de cuatro, comprobando que los hechos se habían producido en una finca en el municipio mallorquín de Sant Joan.
En dicha finca, el pasado lunes, el grupo de cinco personas, armadas con escopetas, se adentró en la casa para robar marihuana de una plantación perteneciente a un clan. Es lo que se conoce como ‘vuelco’ en el argot policial.
Estos cinco consiguieron reducir a dos personas que cuidaban de la plantación y empezaron a recolectar la marihuana. Sin embargo, la plantación contaba con cámaras de seguridad que estaban conectadas en directo con los responsables de la misma, quienes al enterarse del robo acudieron al lugar, armados con cuchillos y palos.
En ese momento se produjo una pelea entre los dos miembros del grupo y las personas vinculadas a la plantación agredieron con armas blancas, presuntamente, a los intrusos, sufriendo éstos varias puñaladas. Uno de ellos recibió incluso un golpe en la cabeza con un instrumento contuso, supuestamente un hacha.
Como pudieron, los cinco escaparon del lugar a bordo del vehículo en el que habían llegado y el conductor, dada la gravedad de las lesiones y el estado de algunos heridos, los trasladó a Son Llátzer.
Por su parte, las dos personas que guardaban la plantación fueron trasladadas por sus allegados a Son Espases.
Los agentes llevaron a cabo una entrada y registro y comprobaron la existencia de una plantación de marihuana en la finca, con 700 plantas, por lo que procedieron a desmantelar la misma y a intervenir toda la droga. También localizaron una pistola con silenciador que estaba oculta en una caseta de la finca y una navaja de grandes dimensiones.
El grupo de Homicidios, ante los hallazgos y evidencias, informó a los detenidos de los motivos del arresto, a cinco de ellos como presuntos autores de un delito de robo con violencia –los que entraron en la finca a robar la marihuana– y a los otros dos como presuntos autores de tenencia ilícita de armas, cuatro tentativas de homicidio y tráfico de drogas.
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