VALÈNCIA, 5 (EUROPA PRESS)
La Guardia Civil, con la colaboración de la Generalitat, ha investigado a 13 personas en las provincias de Alicante y Valencia que presuntamente se dedicaban a comerciar con medicamentos veterinarios sin control. Se han intervenido hasta 200 dosis de medicamentos veterinarios y 2.850 recetas veterinarias.
Las investigaciones se iniciaron en abril de 2022, cuando el Colegio de Veterinarios de Alicante denunció que un establecimiento dedicado y especializado en alimentación de animales de la provincia realizaba dispensas “sin ningún tipo de control” a pesar de no estar autorizado para la venta de medicamentos veterinarios, informa el instituto armado.
A raíz de estas anomalías, el Seprona dio inicio a la operación Henus. Una vez analizada toda la documentación, los agentes identificaron el modus operandi empleado por un comercio detallista autorizado para la comercialización de medicamentos veterinarios de la comarca de l’Horta Sud (Valencia).
Este método, conocido como “receta inversa”, consiste en la compra y venta del medicamento sujeto a prescripción veterinaria mediante la presentación de una receta veterinaria no expedida a consecuencia de un acto clínico previo sino por petición de los clientes. Con esta práctica aumentaban el número de ventas y las ganancias económicas.
PELIGRO PARA LOS CONSUMIDORES DE CARNE DE ANIMALES
La empresa investigada contaba con un veterinario que realizaba la prescripción de las recetas sin el reconocimiento físico del animal, desconociendo su estado sanitario. Todo este entramado suponía un peligro tanto en los animales y, en algunos casos, en los posibles consumidores finales de la carne de estos animales.
El cabecilla de la trama, el responsable y el comercial del establecimiento detallista, contaba con la colaboración de un veterinario de confianza que por medio de códigos falsos o inexistentes de explotaciones del Registro General de Explotaciones Ganaderas (REGA) realizaba la correspondiente receta veterinaria. También colaboraba con él una licenciada en farmacia que omitía las funciones de control que legalmente tenía asignadas.
Mientras avanzaban las investigaciones se realizó un registro en la empresa investigada, además de una veintena de inspecciones a otros comercios vinculados. Todos están ubicados en las provincias de Alicante y Valencia y se dedican a la venta de alimentación para animales, explotaciones ganaderas y núcleos zoológicos.
Entre los pasados 1 y 16 de febrero se procedió a la explotación de la operación, resultando investigados el gerente de la empresa, el veterinario, la farmacéutica y diez responsables de pequeños comercios.
A todos ellos, 11 hombres y dos mujeres de entre 43 y 72 años, se les han imputado los delitos de falsedad documental, grupo criminal y contra la salud pública, según su grado de participación.
Del registro y de las inspecciones se ha intervenido 2.850 recetas veterinarias, 200 dosis de medicamentos veterinarios sujetos a prescripción veterinaria preparados para su distribución y gran cantidad de documentación que todavía se sigue analizando. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Dénia lleva la causa.
Los agentes han contado con la colaboración del área de Inspección de Farmacia de la Conselleria de Sanidad y de la sección de Producción y Sanidad Animal de la Conselleria, además del Colegio de Veterinarios de Valencia y del Colegio Oficial de Veterinarios de Alicante.
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