ARMILLA (GRANADA), 29 (EUROPA PRESS)
La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial en calidad de investigado a un hombre de 45 años por presuntamente estafar a varios vecinos de Armilla (Granada) haciéndose pasar por instalador autorizado de una empresa instaladora de gas, según ha informado este miércoles en una nota de prensa el Instituto Armado.
El responsable de esta empresa en Granada denunció que estaban recibiendo numerosas quejas de clientes a cuyos domicilios había acudido un antiguo empleado utilizando unas credenciales falsificadas, manipulaba los contadores de gas, les cobraba 300 euros y no les daba factura, lo que estaba generando un grave daño a la imagen de la empresa.
A esta primera denuncia se unió la de un vecino de Churriana de la Vega que acudió a la Guardia Civil porque lo habían estafado. Un supuesto instalador de gas llegó a su domicilio y le dijo que podía optimizar el aprovechamiento y de ese modo reducir el consumo, lo que redundaría en que al final pagaría una factura mucho menor.
El denunciante accedió, vio cómo este individuo quitaba el contador del gas, lo manipulaba y lo volvía a colocar en su sitio, y al terminar cobró por ello 300 euros. El denunciante le pidió la factura y el supuesto instalador le dijo que se la entregaría unos días después, pero tras varios días esperando y no recibirla, se puso en contacto con la empresa y allí le contestaron que había sido estafado.
Tras las denuncias, los investigadores de la Guardia Civil de Armilla han localizado a este individuo y lo han investigado como presunto autor de un delito de estafa y de un delito contra la propiedad industrial.
La compañía suministradora del gas informa que las instalaciones y las revisiones periódicas que realizan no se abonan a los operarios que las llevan a cabo, pues no están autorizados a cobrar y la compañía es la que, tras la revisión, pasa la factura al cliente.
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